Bilbao.- Unai Sordo ha sido elegido hoy nuevo secretario general de Comisiones Obreras de Euskadi con el 84,3 por ciento de los votos de los delegados asistentes al IX Congreso de la central, celebrado ayer y hoy en Bilbao.
Unai Sordo, de 35 años, forma parte de la ejecutiva de CCOO de Euskadi desde el año 2000 y hasta hora era responsable de la central en Vizcaya.
La candidatura del nuevo secretario general, la única presentada, ha recibido 355 votos a favor de los 421 emitidos, mientras que 64 han sido en blanco y otros 2 han sido declarados nulos.
La nueva comisión ejecutiva de CCOO de Euskadi, formada por 25 miembros, ha tenido un respaldo ligeramente menor, del 79,1 por ciento, ya que, de los 421 votos emitidos, ha recibido 333 a favor, 87 en blanco y 1 nulo.
Unai Sordo releva en el cargo a Josu Onaindi, quien ha dirigido el sindicato desde junio de 2000, cuando en el VII Congreso desbancó al entonces secretario general, Santiago Bengoa.
Durante su primera intervención como secretario general, Sordo ha apostado por impulsar el diálogo social, "ese que es inexistente en Euskadi", ya que es "la única forma de hacer el papel de contrapoder a las decisiones de los poderes públicos".
En este sentido, ha criticado "el desprecio al diálogo social que hacen algunos", porque, en su opinión, "supone dar carta de libertad a los poderes públicos y dejar en manos de las patronales ejercer de lobby de presión en base a sus intereses".
Sordo ha lamentado que en Euskadi "se haya intentado perder la referencia del convenio sectorial" y por ello ha abogado por "reforzar la negociación colectiva" para aprovechar su "potencialidad" en materias como salario, derechos laborales, gestión del tiempo de trabajo o igualdad en las empresas.
El nuevo secretario general de CCOO de Euskadi ha hecho un llamamiento para que, con la crisis, "no se pretenda justificar cualquier decisión unilateral de las empresas para despedir gente, para recortar derechos o condicionar la negociación colectiva".
Además, ha criticado que, "ni siquiera en los momentos de incertidumbre económica", el departamento de Trabajo del Gobierno vasco "se ha dignado a facilitarnos información sobre las empresas afectadas por ERE's".
CCOO de Euskadi, ha anunciado Sordo, "va a seguir vigilando, negociando o movilizando ante las actuaciones empresariales o de la propia administración" y "va a ser riguroso, responsable y combativo en función de las realidades de cada empresa y sector".
Sobre la solución a la crisis económica, el secretario general de CCOO de Euskadi ha considerado que "no pasa por cuestionar derechos, sino todo lo contrario", y ha añadido que "no hay crecimiento sostenido ni sostenible si no parte de la lucha sindical".
Asimismo, ha destacado que CCOO ocupa la "centralidad sociológica" en Euskadi con su defensa de la "pluralidad y la diversidad" de la sociedad, así como del "pacto transversal como clave para definir o redefinir el autogobierno vasco".
Unai Sordo ha valorado que la sociedad vasca está "harta de frentismos, harta de acumulaciones de fuerza y de debates estériles y circulares, que sólo provocan enfrentamiento, división y desmotivación".
Durante su intervención ante los delegados, ha explicado que CCOO de Euskadi debe ser un sindicato "adaptado a las nuevas realidades" y, entre los retos de la central, ha enumerado "optimizar los medios económicos y organizar mejor los medios humanos y militantes para llegar a donde no llegamos".
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