La Nueva Experiencia Xbox es el pomposo nombre de la campaña de Microsoft para ampliar el público de su consola Xbox 360. Consiste en una nueva apariencia de los menús, en la incorporación de avatares para los usuarios y en el lanzamiento de una línea de juegos sociales o de fiesta, como ‘Lips’, ‘Scene it?’ y ‘You’re in the movies’. Es una apertura hacia los jugadores casuales, pero que nadie piense que estamos ante el equivalente al sello ‘Touch Generations’ de Nintendo: Microsoft intenta llegar a más gente, no cambiar de filosofía.
En Europa la Nueva Experiencia Xbox ha venido acompañada por un servicio de descarga de películas y series de televisión, que ya funcionaba en Estados Unidos. Cada título cuesta 2,95 euros en definición estándar y 3,95 euros en alta. Una vez descargada, tendremos 24 horas de alquiler desde la primera vez que la reproducimos, tiempo tras el cual el archivo desaparecerá de nuestro disco duro.
El cambio más importante es el dashboard, claramente a mejor. Mucho más fácil de manejar y más claro que el anterior, aunque sigue sin ser tan agradable como los menús de PS3 o Wii, ha multiplicado por tres las ventas del bazar online de la consola de Microsoft. Y es que su principal ventaja es que la tienda online está perfectamente integrada como un apartado más de los menús. Los avatares están ahí para quien los quiera —que no es mi caso—, pero en ningún momento son obligatorios. Es curioso cómo las tres consolas han terminando teniendo avatares: los Miis de Nintendo, muy simples, pero mejor integrados en los juegos; los del Home de PlayStation 3, que no se sabe muy bien qué alcance tendrá; y por último los de Xbox, que de momento no tienen demasiado recorrido.
Los tres juegos que lanza Microsoft en esta nueva línea tienen mucho en común entre sí. Están pensados para disfrutar en familia, incluyen software y accesorios y son más o menos adaptaciones de juegos que Sony lleva explotando muchos años. Poder tener un juego de karaoke o un concurso como los de la tele son aspectos muy importantes a la hora de decidir la compra de una consola, ya que además de otros usos servirá para las reuniones familiares.
Seguramente, y aunque a los jugadores tradicionales (o hardcore, o frikis, llamadnos como queráis) nos dé pena, ‘Lips’ es el juego más importante del catálogo de la 360 para estas navidades. Es un pasito más de esta consola, que no tiene nada prácticamente que envidiar a PlayStation 3.
Respecto a ‘Singstar’ tiene el inconveniente de una lista de canciones mucho más reducida, pero es simplemente una cuestión de tiempo. En PS3 es posible jugar a todos los ‘Singstar’ aparecidos en PS2, que incluyen decenas de canciones y a muy buenos precios. En cuanto al repertorio que se incluye en ‘Lips’ no hay una gran diferencia con su competencia. Temas principalmente poperos y actuales, aunque se permite unos cuantos más propios de karaoke que de ‘Singstar’ como ‘Olvídame y Pega la Vuelta’ (Pimpinela), ‘A Quién le Importa’ (Alaska) o ‘Stand By Me’ (Ben E. King).
Lo mejor, y al mismo tiempo la mayor diferencia con Singstar, son los micros. Inalámbricos y con sensor de movimiento, no sólo son más cómodos y bonitos, sino que además tienen nuevas funciones, como la puntuación a la coreografía o la percusión.
En negativo hay que poner la posibilidad de importar canciones desde cualquier dispositivo mp3. Sonaba muy bien eso de no tener que comprar las canciones para jugar y poder hacerlo con cualquier mp3 almacenado en un disco duro, pero el resultado es frustrante al no tener una puntuación fiable. El juego no distingue entre voz e instrumentos, y por supuesto no se pueden importar letras, así que hay que conocerlo de memoria. Vamos, muy parecido a cantar con la consola apagada.
Comparte problemas con ‘Singstar’, como la imposibilidad de bajar totalmente el volumen del cantante, y en cuanto a la puntuación es aún menos exigente que el juego de Sony. Eso sí, la 360 ya tiene su karaoke. Y con ‘Young Folks’.
El año pasado, a propósito del primer ‘Scene it?’, comentábamos que si Microsoft quería llegar a ese público que juega a la Wii se había quedado corto. Este año sin duda la apuesta es mucho mayor, y no sólo en cantidad. El nuevo ‘Scene it?’ es mejor que su predecesor, principalmente porque se actualiza con nuevas preguntas —y eso que de por sí ya está muy actualizado con cuestiones sobre películas de 2008.
Sigue siendo un poco sosa la mecánica del concurso, y seguimos echando de menos pruebas que provoquen mayores piques entre los concursantes como las de 'tira la tarta' de Buzz! En general, salvo de inclusión de los avatares de los usuarios, son pocas las novedades: los mandos son idénticos a los de la versión anterior, así como el tipo de pruebas y su presentación en pantalla.
Un ¿juego? en el que nos metemos, gracias a un invento mágico llamado cámara web, en unos escenarios predibujados y realizamos cortometrajes con nuestros amigos en simpáticas fiestas. ¿Curiosidad o chorrada? Desde luego, yo me inclino más por la segunda opción, pero es que no conviene tomárselo demasiado en serio. La edad apropiada para disfrutar de ‘You are in the movies’ sería entre cuatro y seis años, y su mayor inconveniente, el hecho de que hay que iluminar muy bien el salón para que la experiencia resulte gratificante. Sony lanzó varios ‘Eye Toy’ para Playstation 2, y ya entonces esta tecnología parecía frustrante y fea. Estos años que han pasado no han mejorado la cosa.
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