Aunque el uso de las secadoras es muy diferente entre países, la entrada de este electrodoméstico en cada vez más hogares del planeta está reduciendo la costumbre de secar la colada al sol en verano o en los tendederos interiores en invierno. En España, las secadoras, que pueden gastar hasta 450 kWh anuales, todavía no están muy extendidas y suponen sólo el 2% del gasto en un hogar, pero su avance va tan rápido como desaparecen en los patios las cuerdas de tender.
Esto resulta especialmente llamativo en países como Estados Unidos o en Canadá. Pues si en España sólo hay secadora en un 5% de los hogares, este aparato funciona en el 82% de las casas estadounidenses. Estas secadoras son las responsables del 6-10% de la electricidad consumida en una familia media en Estados Unidos y Canadá, debido a su uso extendido en estos países. Un 10% de un hogar medio que también utiliza la calefacción o aire acondicionado, un calentador de agua, un frigorífico y un congelador, un horno, un lavavajillas y una lavadora. Una secadora estándar de EEUU o Canadá usa aproximadamente 900 kWh de electricidad en un año y puede llegar a producir hasta una tonelada de emisiones de gases de efecto invernadero. Cinco de estas secadoras juntas pueden producir en un año más o menos tantas emisiones de efecto invernadero como un coche medio.
Aprovechando la luz del sol y tendiendo toda la ropa obviamente no se usa nada de electricidad ni gas y se ahorra el coste entero del funcionamiento de una secadora, lo cual depende de cuanto se emplee, el coste del kWh y la potencia de la secadora. Además de ayudarte a ahorrar algo de pasta, tender la colada reduce la contaminación del aire, la producción de gases de efecto invernadero y la demanda total del sistema eléctrico. Uno podría preguntarse porque la gente de EEUU y Canadá no tiende la colada bajo el sol, al menos por los beneficios económicos que ello conlleva.
La respuesta en algunos casos se encuentra en la idea de que la ropa tendida es fea. Aunque dejar la ropa a secar en el sol es sin duda la opción más eficiente económicamente y más respetuosa con el medio ambiente, la fealdad de las bragas tendidas resulta aparentemente un asunto de mayor preocupación que el uso de energía excesivo de estos países. Algunos ciudadanos incluso han prohibido en sus comunidades los tendederos que dan a la calle. Los tendederos se consideran tan antiestéticos que su presencia puede hasta bajar el valor de la propiedad de la comunidad. Las multas llegan a 500 dólares.
Inventados a principios del siglo XIX, las secadoras acaban de empezar a llegar a algunos países en vías de desarrollo. En India, que fue una vez uno de los países más pobres, personas a las que antes no les alcanzaba el dinero para una secadora están empezando a enchufar en sus casas estos aparatos gracias al desarrollo rápido de su país. Aunque también existen muchos ciudadanos indios que esperan que su sociedad no adopte los hábitos de consumo excesivo del mundo occidental.
En Norteamérica, una organización sin ánimo de lucro llamada Project Laundry List (PPL) lucha con fuerza por el derecho a tender la colada fuera de casa. El PPL tiene sucursales en EEUU y Canadá y está en el proceso de formar otras en el Reino Unido y Corea del Sur. La organización, que difunde en su web la canción 'Happiness Is Waiting /Cuelga tu colada en la cuerda de tender', así como una calculadora para estimar el ahorro de seguir este consejo, ha ayudado a aprobar legislación en algunas ciudades en EEUU y Canadá que permiten a los ciudadanos tender su colada donde antes estaba prohibido.
El PPL insiste en que, por el proceso natural de sublimación, si está soleado, podemos tender la ropa fuera incluso en los días con temperaturas bajo cero. Por lo demás, la colada se puede tender dentro de la casa para proveer algo de humedad en los meses muy secos de invierno. Si todavía tienes que usar una secadora, la comunidad de Navarra e Intelligent Energy Europe (IEE) recomiendan comprar una secadora de "la clase A", que consume 230 kWh anuales. También proveen una lista de recomendaciones para la utilización eficiente de estos electrodomésticos.
*Erin Snook es estadounidense y vive en España. Es licenciada en Ciencias Ambientales y Ciencias Políticas.
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