Málaga.- El nuevo obispo de la diócesis malagueña, Jesús Esteban Catalá Ibáñez, ha anunciado hoy en su ceremonia de posesión, celebrada ante miles de fieles en la Catedral de Málaga, que quiere ser "fiel" a esta misión y "desgastar" su vida en la tarea que le han encomendado.
Durante la homilía, el nuevo pastor de la Iglesia de Málaga ha agradecido la confianza del Papa Benedicto XVI por haberlo designado como obispo de esta diócesis, y ha destacado que viene a servir a la "milenaria" iglesia malacitana, "que ha dado hermosos frutos de santidad en muchos de sus hijos, desde San Patricio y los mártires y patronos de la ciudad San Ciriaco y Santa Paula, hasta los beatos Manuel González, Juan Duarte o la madre Carmen".
"La riqueza de la iglesia han sido siempre los pobres", ha manifestado Catalá, que ha señalado que como pastor viene a confortar de fe a los malagueños, a sostenerlos en la esperanza, y ejercitarse junto a ellos en la caridad.
Ha finalizado su intervención parafraseando la expresión musical: "Málaga querida, que bonitos ojos tienes, déjame que te contemple, permíteme que te acompañe y concédeme poder amarte".
Por su parte, el hasta ahora administrador Apostólico de Málaga, Antonio Dorado Soto, ha recordado sus quince años al frente de la diócesis, y ha agradecido la designación de Catalá como nuevo obispo.
"Os exhorto a que recibáis a nuestro nuevo obispo con todo el afecto entrañable que os caracteriza", ha instado a los fieles, a quiénes ha explicado la juventud y los servicios prestados por Catalá a la iglesia.
Ha subrayado que la diócesis de Málaga se caracteriza por su solidez evangélica y por el poso que han dejado los hijos que han sido beatificados en fechas recientes, y por la búsqueda de caminos nuevos para anunciar el Evangelio a una sociedad "muy dinámica y abierta".
El Nuncio apostólico de Su Santidad, Manuel Monteiro Castro, ha explicado que el nuevo obispo llega a esta diócesis lleno de "buena" voluntad para iniciar la nueva misión que le ha confiado el Santo Padre,y ha pedido a la patrona de Málaga, Santa María de la Victoria que le de "fuerzas" en su "fecunda" labor apostólica.
Jesús Esteban Catalá Ibáñez ha entrado a la Catedral de Málaga por la puerta jubilar y principal de la Catedral, donde ha sido recibido por el Cabildo, que le ha ofrecido el Lignum Crucis.
Tras esto, ha visitado la capilla del Santísimo Sacramento, donde ha orado y se ha revestido para la celebración eucarística, a la que han acudido alrededor de 2.000 fieles, y una treintena de obispos y cargos eclesiales.
Algunos de los asistentes han sido los cardenales Antonio María Rouco Varela, de Madrid, Carlos Amigo Vallejo, de Sevilla o Agustín García-Gasco y Vicente, de Valencia.
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