México.- La Procuraduría General de la República de México (PGR, fiscalía) admitió hoy que el cártel de los hermanos Beltrán Leyva se infiltró en el organismo y sobornó a altos mandos encargados de la lucha contra el crimen organizado.
"No hay tolerancia al crimen ni tolerancia a las complicidades de la corrupción", dijo ante los medios de comunicación el Fiscal General, Eduardo Medina Mora.
Estados Unidos, agregó, ha colaborado con México en localizar a varios mandos de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) involucrados, algunos de los cuales están ya procesados.
"Esta investigación aún no concluye y es necesario seguir más líneas de trabajo y hacer comparecer a otras personas que al parecer también obtuvieron información clasificada para fines ajenos al servicio público", añadió.
Según Marisela Morales, titular de la Siedo, un organismo dependiente de la PGR y encargado de la lucha contra los cárteles de la droga mexicanos, los funcionarios implicados "recibían pagos que iban desde 150.000 hasta 450.000 dólares mensuales" del cártel de los Beltrán Leyva.
Hasta el momento hay cinco personas incriminadas y un total de 35 que han sido separadas de sus cargos sobre la base de actuaciones judiciales fundamentadas en registros, documentación, dictámenes periciales y testimonios recabados por el fiscal de la Siedo, agregó Morales.
Entre los mandos implicados el más importante es el ya ex director general adjunto de Inteligencia en la Siedo, Fernando Rivera Hernández, quien está detenido y a disposición judicial desde el 4 de agosto y se ha constatado que recibía dinero del cártel encabezado por Arturo y Alfredo Beltrán Leyva, dijo Medina Mora.
El ex funcionario tenía "mando directo sobre los elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI)" adscritos a la Siedo y "al menos en el último año y medio" estuvo supuestamente involucrado en la trama descubierta.
Otro acusado es Miguel Colorado González, Coordinador General Técnico de la Siedo, quien "proporcionó información general de investigaciones" al narcotráfico, según las fuentes.
Aparte de los dos altos mandos hay otros tres agentes federales implicados y una cuarta persona que está prófuga.
En relación con Colorado González, Estados Unidos ha pedido a México orden de detención con fines de extradición para su entrega a la Justicia estadounidense, que se ha concedido ya.
Se presume que el funcionario podría haber estado implicado en dar a conocer nombres de agentes del Departamento Antidrogas Estadounidense (DEA) en este país.
"Nuestros gobiernos venimos trabajando juntos y unidos de tiempo atrás para cerrarle los espacios a la delincuencia organizada trasnacional", añadió Medina Mora.
"Con el intercambio invaluable de información de inteligencia con la DEA, que acredita la confianza, responsabilidad compartida y respeto recíproco, seguiremos adelante en la lucha contra los enemigos de nuestras sociedades", apuntó.
Tras destaparse la trama, el titular de la PGR anunció un "relanzamiento de procedimientos" para la custodia de información en la Siedo.
También señaló que la PGR trabajará en seguir tras la pista de otras personas implicadas en esta red de corrupción.
El diario El Universal, que hoy informa en portada sobre la trama, apunta a que se remontaba al menos a 2004, y que con ella se pusieron en riesgo importantes investigaciones y acciones contra el narcotráfico en México, que este año asesinó a más de 4.000 personas en el país.
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