La Habana.- Cuba asistirá a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 con una delegación de 165 atletas y el difícil compromiso de igualar el undécimo lugar alcanzado en Atenas 2004, sorteando la mala suerte de las lesiones y las deserciones de importantes figuras.
La isla ha distribuido sus cupos en 17 disciplinas que incluyen el atletismo, béisbol, judo, lucha, voleibol, boxeo, remo, pesas, clavado, canotaje, ciclismo, tiro deportivo, taekwondo, natación, esgrima, pentatlón moderno, y tiro con arco.
Pero sus tradicionales "pesos pesados" en citas olímpicas son el atletismo, los deportes de combate (judo, lucha y boxeo) y el béisbol, disciplinas que enfrentan pronósticos desiguales y podrían ofrecer a la afición local fantásticos espectáculos o grandes decepciones.
Para Pekín las autoridades deportivas han anunciado el objetivo de "hacer el mejor papel posible y ubicarse cerca del décimo escaño", una aspiración que respaldan los éxitos en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro del año pasado.
El boxeo, otrora la "locomotora" del deporte antillano, lleva un conservador pronóstico de dos medallas para el equipo conformado por diez pugilistas, ninguno de los cuales tiene experiencia olímpica.
Tras ganar 5 preseas de oro, 2 de plata y 1 de bronce en Atenas, el conjunto cubano se descalabró con las deserciones en diciembre de 2006 de Yan Barthelemy (48 Kilos), Yuriolki Gamboa (51) y Odlaneir Solis (91), todos campeones en la cita griega.
En agosto de 2007, el cuarto oro en Grecia, Guillermo Rigondeaux (54), protagonizó junto Erislandy Lara un fallido intento de deserción en los Panamericanos de Brasil, por el cual los dos titulares del mundo, considerados entonces los mejores boxeadores de la isla, fueron apartados de la selección nacional.
Lara salió de Cuba hace unas semanas en una lancha rumbo a México, desde donde viajó a Alemania con un contrato profesional, mientras que Rigondeaux permanece en La Habana a la espera de "una respuesta" de las autoridades deportivas que le permita retomar su carrera.
Los pronósticos de entrenadores y especialistas ubican ahora al campeón mundial Yordenis Ugás (60), Andry Laffita (51), y Emilio Correa (75), como los mejores candidatos para subir al podio en Pekín.
El béisbol, el deporte nacional y para muchos la medalla más significativa de la delegación, tendrá en esta cita el reto de cerrar con broche de oro la que podría ser su última competencia olímpica, después de ser excluido de los Juegos de Londres en 2012.
Cuba insiste en el favoritismo de su equipo para ganar el título olímpico, pero en los últimos días la afición y la prensa han cuestionado "la forma" deportiva y la dirección del conjunto, tras perder ante una selección universitaria de EE.UU. en la final del torneo de Haarlem (Holanda).
Hasta el líder cubano Fidel Castro intervino en la polémica con un artículo titulado "El equipo olímpico de pelota", en el que resaltó que a pesar de ese "duro revés" los jugadores de la isla "no han sido vencidos" y pidió no desalentarlos.
Este mes, en menos de una semana, salieron de las filas cubanas a Pekín el ciclista Pedro Pablo Pérez, en estado de gravedad después de un accidente automovilístico, y el saltador de altura Víctor Moya, quien sufrió una grave lesión en una rodilla.
La ausencia de Moya no desluce a la selección de atletismo, sin dudas la gran promesa que lleva Cuba a los Juegos Olímpicos, con el mayor número de clasificados (47) y 22 figuras por debajo del lugar 20 en el ránking mundial.
Entre las candidaturas más fuertes de la isla aparece Dayron Robles, dueño del récord del mundo en los 110 metros con vallas desde junio pasado con crono de 12.87, y cuyo duelo con el chino Liu Xiang promete ser uno de los grandes momentos de la disciplina.
En la competencia del triple salto, categoría femenina y masculina, se presentarán Yargelis Savigne y David Giralt respaldados por la segunda mejor marca de la temporada, el mismo lugar que ostentan el corredor de 800 Yeimar López y el saltador de longitud Ibrahin Camejo.
Por su parte, las veteranas Yipsi Moreno y Osleydis Menéndez, en martillo y jabalina, respectivamente, intentarán retornar al podio olímpico, un importante reto para la segunda después de padecer un calvario con las lesiones desde 2006.
Con posibilidades de oro en el medallero también está la judoca Driulis González, quien irá por su quinta presea olímpica, escoltada por una selección que puede dar sorpresas.
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