Santa Cruz de Tenerife.- La consejera de Agricultura, Pilar Merino, señaló que la mejor forma para garantizar un rendimiento agrícola mínimo ante fenómenos adversos como la ola de calor es disponer de una póliza de seguro y apuntó que el Gobierno canario concederá subvenciones máxima posible para que el cien por cien de las explotaciones agrarias estén aseguradas.
La consejera hizo estas afirmaciones en una comisión parlamentaria, en la que compareció a instancias de CC, para informar sobre los daños ocasionados por la ola de calor en las producciones de papas en las medianías de Tenerife.
Merino señaló que es importante que los agricultores se mentalicen de la importancia de disponer de estos seguros agrarios y recordó que en el nivel de aseguramiento en sectores como el de la papa es prácticamente nulo.
Indicó que en la última ola de calor se perdió el 80 por ciento de las producciones de papa, señaló que si no existe seguros no se pueden conceder las ayudas previstas por el plan nacional y dijo que se debe conseguir que en Canarias estén todas las explotaciones agrícola aseguradas porque siempre existen riesgos meteorológicos.
Recordó que la renta agrícola a nivel nacional ha disminuido un 14 por ciento, y con esta reducción es difícil pedirle al agricultor que se asegure pero para ello el Gobierno subvencionará al máximo la ayuda posible para que todas las explotaciones tengan cobertura de seguro.
En el caso de la papa, la consejera apuntó que se tratan de explotaciones muy pequeñas, con una media de 3,8 hectáreas y subrayó que se ha producido un abandono del 62 por ciento debido a factores como la ola de calor.
Puntualizó que la superficie de secano y de regadío ha disminuido hasta las 40.000 toneladas.
La consejera señaló que la plaga ocasionada por la polilla guatemalteca de la papa también ha afectado a esta producción y subrayó que la Consejería tiene fondos para retirar la producción afectada.
Flora Marrero, del grupo de CC, señaló que en los últimos cinco años, Canarias ha sufrido cinco olas de calor y la última, ocurrida en abril, afectó especialmente a Tenerife y su zona de medianías y altas.
Marrero señaló que aunque fueron afectados varios sectores, las producciones de papa fueron las que se vieron más perjudicadas con unas pérdidas superiores a los cinco millones de euros.
Cristina Tavío, del grupo Popular, señaló que la Consejería ha afrontado este problema "con valentía" y procurará que el seguro agrario abarque al cien por cien de las explotaciones agrarias.
Belén Morales, del grupo Socialista, dijo que la Consejería no tiene una respuesta rápida ante estas situaciones previsibles y apuntó que por la ola de calor, los frutales ha perdido el 40 por ciento de su producción y el 80 por ciento de las producciones de papas se han perdido.
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