España pierde el paso europeo en tecnología

MADRID.-  Francisco Ros tiene trabajo. Mucho. Confirmado en su puesto de secretario de Estado de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información se ha encontrado con un nuevo informe de la Comisión Europea. Diagnóstico: "el uso de las tecnologías de la información por las empresas y los hogares está todavía por debajo del promedio de la Unión Europea y el progreso es lento".

Los usuarios y la inversión en tecnología son los principales problemas con los que no ha podido el Plan Avanza, la gran estrategia socialista de la sociedad de la información desde el año 2005.

Sólo el 44% de los españoles son internautas frecuentes frente al 51% de la media europea. El puesto número 18 de Europa, muy por debajo de la potencia económica del país.

Las actividades de los españoles en internet no son muy diferentes a las del resto de los europeos excepto en tres áreas: la comunicación por correo electrónico es menor, todavía cuesta confiar en la banca online y casi no se usa la telefonía por internet y las videoconferencias.

Sólo en dos de las actividades recogidas en el estudio Europa i2010 los internautas españoles están por encima de la media europea: una cuarta parte descarga música y juegos y el 24% lee prensa digital.

El informe reconoce el esfuerzo realizado en el desarrollo de la banda ancha, pero critica que sólo el 18,3% de los hogares disfruten de internet de gran velocidad, el duodécimo puesto en el ránking europeo. Mucho tiene que ver la falta de inversión en redes de los últimos años y la apuesta por el ADSL en detrimento de otras tecnologías. El 88% de las conexiones de banda ancha son a través de ADSL frente a un 77% en Europa.

España destaca por la disponibilidad en internet de los servicios públicos. El 70% son accesibles online, pero el informe sobre el futuro digital europeo alerta sobre los problemas de la descentralización de la administración pública y la falta de comunicación entre Estado y autonomías para hacer más ágiles los servicios de e-gobierno y administración electrónica.

Pero el mayor problema está en los conocimientos tecnológicos de los españoles y la inversión empresarial en I+D+i (Investigación + Desarrollo + Innovación).

España es el vigésimo país de Europa cuando se mide la cuota del sector de las tecnologías de la información en la economía, con un 5,3% del producto interior bruto (PIB), y la inversión en investigación y desarrollo es un misérrimo 0,3 del PIB. Sólo los países del Este incorporados a la Europa de los 25 y Portugal están por detrás.

De las cuatro grandes áreas del Plan Avanza y las políticas puestas en marcha por el Ministerio de Industria en estos años sólo los servicios públicos digitales han despegado. También en sociedad de la información nuestro país depende mucho de la inversión pública y de las situaciones de monopolio heredadas.

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero en su discurso de investidura renovó su compromiso con la sociedad de la información, pero la extensión de la TDT (televisión digital terrestre), el mantenimiento de la fecha prevista para el apagón analógico para abril de 2010 y la proclamación de una ley general audiovisual que regule el sector de la televisión fueron los ejes de su discurso.

La televisión vuelve otra vez a pesar en exceso sobre una sociedad de la información más necesitada de infraestructuras, alfabetización tecnológica y un decidido impulso a la I+D y la competitividad en el sector público y en el privado.

El Plan Avanza proclamaba en 2005 la necesidad de aumentar la oferta de infraestructuras y servicios de calidad, fortalecer el sector de las tecnologías de la información con más I+D+i, eliminar barreras y garantizar los derechos de los ciudadanos.

El informe europeo vuelve a incidir en la urgencia de resolver esos problemas.