Santander.- El arquitecto Rafael Moneo ha mostrado hoy su "alegría" por que el Ayuntamiento de Santander y el Gobierno cántabro "estén en vías" de superar sus diferencias para la construcción de la nueva sede del Ejecutivo que él ha diseñado y que ha defendido por su interés para el área donde se ubicará.
Tras la reunión que mantuvo con el alcalde, Íñigo de la Serna, y el consejero de Presidencia, Vicente Mediavilla, en la que ha presentado al Ayuntamiento el proyecto, Moneo asegura que "lejos de convertirse en la manzana de la discordia" su diseño "va a cerrar" una zona de Santander "imprecisa e inacabada".
La nueva sede dará continuidad, según el arquitecto, a la "prestancia" del Paseo Pereda y al "vacío" que existe entre las calles Juan de la Cosa y Canalejas, el espacio donde se ubicará.
Moneo se ha mostrado "convencido" de que el proyecto se puede ejecutar "en los términos en los que está planteado" desde hace casi tres años, aunque asegura que intentará adaptarlo a las sugerencias y alegaciones que presente ahora el Ayuntamiento.
El alcalde ha rechazado trasladar su opinión en relación al proyecto, ya que ha explicado que tiene que ser todo el equipo de gobierno municipal "y no Íñigo de la Serna" quien exponga sus sugerencias, en base al "interés general".
De la Serna ha adelantado que estas sugerencias para el proyecto, que podrían afectar a la estructura del edificio pero también a su funcionalidad en relación al entorno donde se ubicará, se analizarán de nuevo con el consejero de Presidencia "posiblemente la próxima semana".
Mediavilla cree que el proyecto "se encardina de forma majestuosa" en la zona, una opinión en la que coincide Moneo, quien añade que la función como sede institucional es "la más adecuada" para ese espacio.
El arquitecto considera que el edificio que ha proyectado reconoce la estructura urbana de la ciudad, pero además "la potencia y se transforma en una construcción puesta a disposición de los ciudadanos".
Moneo no cree que su diseño rompa el urbanismo de la zona de Puertochico, donde, a su juicio, no existe "coherencia urbanística".
En cambio, asegura que el edificio "redundará en beneficio" de esa zona y "reforzará" la trama urbana que hay entre el Paseo Pereda y Las Llamas, además de dar continuidad a la línea de sedes institucionales que comienza en el Ayuntamiento y pasa por la Plaza Porticada y la de Pombo.
"Me alegra que el proyecto no quede en dique seco", insiste Moneo después de que durante casi tres años las diferencias entre el Ayuntamiento y el Gobierno de Cantabria hayan llevado a paralizar la construcción de la nueva sede del Gobierno, para cuya ejecución se convocó un concurso internacional de ideas en el que participaron arquitectos de todo el mundo.
Tanto el alcalde como el consejero han insistido en destacar las buenas relaciones que hay ahora entre ambas instituciones para acometer el proyecto y han recordado que los pasos que se llevarán a cabo seguirán basándose en el respeto institucional y el "principio de lealtad", según De la Serna.
También han coincidido en agradecer a Rafael Moneo su disposición a presentar hoy el proyecto al Ayuntamiento, cuyo responsable reitera que "con la mayor celeridad" trasladará al consejero las sugerencias del Consistorio en relación a este diseño y al entorno en el que se ubica. "Ahora no es prudente hacer valoraciones", opina De la Serna.
Moneo modificó la volumetría del diseño original que ganó el concurso de ideas después de que el Ayuntamiento asegurara que el volumen previsto sobrepasaba el que permiten el plan urbano de la ciudad.
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