La vida secreta del oso pardo cantábrico

Las cámaras-trampa colocadas por el Fondo para la protección de los animales salvajes (FAPAS) en la Cordillera Cantábrica para controlar a los osos pardos se han disparado a lo largo de los últimos diez años más de 10.000 veces. Con una selección de este peculiar material fotográfico, se acaba de presentar una exposición en la Casa Encendida de Madrid, organizada por esta organización conservacionista y la Obra Social CajaMadrid. Como nos comenta el propio presidente de Fapas, Roberto Hartasánchez, "en esta imagen vemos como se enseña a los cachorros, los osos necesitan comunicarse entre ellos y para ello se frotan en lugares específicos como los grandes árboles para marcar su olor corporal".