Charlotte Gainsbourg, un icono de estilo sencillo

Es hija de pero nada tiene que ver con otros chupópteros sin oficio ni beneficio. Sus padres, Serge Gainsbourg y Jane Birkin, formaron en su día una de las parejas más atractivas de todos los tiempos, pero educaron a la pequeña Charlotte en un ambiente más bohemio que petardo.

ERIC GAILLARD (REUTERS)

De día, a cara lavada y estupenda...

Quizás si hubiera crecido en Hollywood y no en Francia ahora sería una celebrity más, pero su discreta, exitosa e ininterrumpida carrera como actriz —y más recientemente cantante— han corroborado que no. Pero, como ya le pasó a su madre en su día, la Gaingsbourg ha demostrado también ser todo un icono de estilo que, en estos días de Cannes, ha sacado a pasear de día y de noche.

Charlotte Gainsbourg, nacida en Londres en 1971, no es de esas mujeres que exhiban su elegancia a través de ropas suntuosas, joyas llamativas y bolsos de 12.000 euros. Al igual que su propia carrera cinematográfica y musical, también como su propia vida privada, el estilo de esta mujer se ha caracterizado siempre por la discreción. ¡Y no por la languidez! Como le sucede a su medio hermana por parte de madre Lou Doillon, no presume de gran belleza física, pero sí de un encanto personal y una naturalidad pasmosos que las hacen únicas a ambas. Y, además de cultivar una imagen muy cool directamente heredada de la Birkin, ha sabido también desarrollar un look propio algo más dubitativo y menos sensual que su progenitora.

Educada dentro de una familia tan especial en la cual su padre era el seductor más feo de todos los tiempos y su madre la musa de uno de los bolsos más caros y glamourosos del mundo, Charlotte supo encontrar su hueco discretamente. Casi sin querer, ella ha resultado ser la inspiración de la celebradísima colección de Vuitton dedicada a Stephen Sprouse. A Marc Jacobs se le ocurrió precisamente en casa de la actriz, donde vio un baúl de LV todo pintarrajeado; pertenecía a Serge Gaingsbourg, y ella lo conservaba de recuerdo en su habitación. Así surgió la idea de decorar el mítico Monogram con prints imitando a graffitis.

JEAN-PAUL PELISSIER (REUTERS)

Y de noche, un poco maquillada, pero muy natural también.

Hace unos años aparecía en la Dazed and Confused como icono cool, y ahora hace lo mismo en la portada de Vogue Paris. Parece que no ha pasado el tiempo por ella, tanto porque se mantiene ciertamente joven como porque su clasicismo innato no pasa de moda. Con Charlotte funciona a la perfección la fórmula de menos es más, y sus colores fetiches son el blanco y el negro, mientras que sus prendas más habituales son las casi unisex. De vez en cuando se permite homenajes más barrocos, pero siempre dentro de sus máximas de sencillez: pocos complementos y mucha clase.

En la proyección en Cannes de su última película, la polémica Anticristo de Lars Von Trier, Charlotte apareció (aparentemente) informal con vaqueros, botas camperas, camiseta de algodón blanca y cazadora de cuero. Naturalidad y falta de complicación para un estilismo... ¡perfecto! ¿Qué más aderezos necesita a esas horas de la mañana? Por la noche, sin embargo, deslumbró con un magnífico Balenciaga estampado en blanco y negro aunque, eso sí, sin un suntuoso despliegue de accesorios. Simplemente unas sandalias del mismo color que el traje y una cartera de mano negra; tampoco se ha pasado dos horas preparando un elaborado moño sino que ha dejado su melena Birkin al viento. Y es que, ¿cuánto hace falta para estar perfecta en una noche de estreno? Para Charlotte, muy poco y con excelentes resultados.

Ahora que hablamos de Balenciaga, su relación con esta firma ha dado frutos como la campaña que protagonizó para ella el pasado invierno. Es íntima amiga del director creativo de la casa, Nicholas Ghesquière, y le apoya siempre que puede acudiendo a sus desfiles. Nótese en esta última imagen que lleva las mismas botas que en Cannes, otro signo de que Charlotte es de esas mujeres normales que repiten prendas como todo hijo de vecino. A veces hace falta tan poco para ser especial...

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.