¿Qué hay de lo mío?

No cabía un alfiler. Los funcionarios del Ministerio de Fomento, que suelen acudir a este tipo de actos, comentaban entre ellos la cantidad de gente que había acudido a la entrega de cartera ministerial a José Blanco, Pepiño, después de que Zapatero le premiara ayer poniéndole de titular de uno de los ejes del "nuevo modelo de crecimiento español".

Emilio Naranjo (EFE)

Villar Mir y Florentino Pérez tampoco se lo han perdido.

No es para menos. Todos querían pillar cacho. A un lado del ring, a la derecha, todos los grandes constructores de este país —este año eran más, según un habitual a estos saraos—. A la cita con el nuevo ministro no han querido faltar Jose Manuel Entrecanales (Acciona), Luis del Rivero, (Sacyr Vallehermoso), David Taguas (presidente de la patronal de las constructoras), Juan Miguel Villar Mir (OHL) o Florentino Pérez,(ACS), entre otros. Los dos últimos, incluso, han hecho doblete y han acudido a dejarse ver por Fomento después de despedir a Solbes en la sede de Economía.

"Aquí se viene a ver y dejarse ver, y más este año", comentaba en Castellana 67 (sede del ministerio de Fomento) un periodista que ya lleva varias tomas de posesión a sus espaldas. El plan de infraestructuras y transporte (PEIT) que deja como herencia una muy criticada Magdalena Álvarez supondrá una gran inyección de dinero a las empresas de la construcción que consigan los ahora tan deseados contratos públicos.

La falta de inversión privada ha consagrado al sector público como el antídoto perfecto para tirar de la economía productiva. Los grandes constructores lo saben y allí estaban, saludando con una gran sonrisa al que puede ser su salvador en un año complicado para un sector que ya no puede tirar más de la construcción de viviendas. El presidente de la patronal empresarial, Gerardo Díaz Ferrán, ha dicho en voz alta lo que muchos seguramente pensaban: "Es necesario que se hagan más obras públicas". ¿Qué hay de lo mío?, pensará más de uno.

Al otro lado del ring, a la izquerda, los políticos. El hombre fuerte del PSOE y vicesecretario del partido también ha estado arropado por sus amigos militantes. Además de ocho de los ministros, por la sala del ministerio también se saludaban diputados socialistas como Inmaculada Rodríguez Piñero, líderes del partido en las comunidades autónomas como Jorge Alarte o Tomás Gómez y presidentes regionales como el balear Francesc Antich o el aragonés Marcelino Iglesias.

Las críticas que ha recibido la remodelación ministerial de ZP ha propiciado que desde las filas socialistas se busque arropar a los nuevos ministros dando a su vez una imagen de cohesión. Además, el hecho de ser uno de los pesos pesados del partido ha atraído a muchos militantes que han escuchado atentos el discurso de 'Pepiño' en le que ha querido recordar a su padre (trabajador jubilado del Ministerio de Fomento) y a Indalecio Prieto (ministro socialista de Fomento durante la República).

Como árbitro del enfrentamiento por el trozo de pastel, decenas de funcionarios del ministerio. Algunos han comentado la inesperada presencia de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, enemiga número uno de Magdalena Álvarez. Otros, hacían comentarios sobre los que dentro de poco serán ya sus ex jefes.