Déjate crecer el flequillo, también en la ropa

Los británicos han empezado a utilizar la expresión ‘fringe benefits’ (retribuciones en especie) en el sentido literal del término, beneficios del flequillo, después de que este corte de pelo se haya extendido mucho más allá de la frente de las personas. Lo que empezó hace un par de temporadas con las ya muy comunes sandalias con flecos y continuó con bolsos decorados con el mismo estilo, ahora se ha extendido al textil y a la joyería de una manera sorprendente. ¿Hemos dicho ‘un par de temporadas’? Perdón, queríamos decir un par de pares de décadas porque la verdadera pionera en esto del fideo es nuestra eurovisiva Salomé, que movía como nadie los espaguetis de su vestido al ritmo de ‘Vivo Cantando’.

Pero ya centrándonos en la temporada que nos ocupa, primavera/verano 2009, sí que es cierto que los flequillos se han extendido de manera muy llamativa en camisetas y vestidos... ¡y con excelentes resultados! Eso sí, de momento la mayoría son más bien inaccesibles, pero los aguilillas diseñadores de las grandes cadenas de bajo coste no tardarán en poner la vista en estas aún cotizadas piezas. En efecto, flequillo is in the air.

De momento nos podemos conformar con ver joyas como este megaflequillo de Jil Sander que recorre el look de arriba abajo. En efecto, no es el estilo más cómodo y sencillo de llevar, pero sí lo es más este little black dress de Sass & Bide cuyo flequillo forma un sobrio triángulo no demasiado llamativo. Más años 20 y de auténtica flapper es éste de Manoush con flecos en la espalda, el bajo y el frontal. ¡Súper chic! Éste a lo mejor asusta un poco por su similitud con el pelo de verdad: es de The Modernist y pertenece a la próxima temporada otoño-invierno. Sólo para expertos.

En el campo de las camisetas sí que hay cosas tan asequibles económica como estilísticamente. Empezamos con Urban Outfitters, donde hemos dado con esta camiseta de tirantes negra con grandes flecos en el frontal que aportan un efecto muy country si se combina con una pieza de cuero, como en la imagen. Más barata es aún la opción de Top Shop, unos 25 euros, por esta túnica también negra decorada con sencillos flecos; con pitillos o leggings es todo un acierto. Atrevido, precioso y carísimo es este top de Foley+Corinna completamente cubierto de flecos en degradé por delante y por detrás. Festivo, elegante y caprichoso. Aunque, para capricho, este otro espectacular top de Vera Wang de 725 dólares rematado con un gran flequillo horizontal.

Muy 'à la Salomé' y mucho más barato es este pequeño bolero con fideos de Forever 21 que bien merece hacer un pedido.

La joyería también se ha rendido al flequillismo, y que conste que no nos referimos a esas elegantes piezas de artesanía made-in-China que hay en cualquier Todo a 0,60. Por el contrario, se trata de piezas ultra sofisticadas como este inmenso e inasequible collar de Kiki de Montparnasse que cuesta la friolera de 600 dólares. En ACB tenemos éste más discreto y triangular de estilo boho por 232 euros, aunque si realmente quieres precios anticrisis pásate por Accessorize y hazte con esta pequeña gargantilla con un flequillito corto y dorado por unos 16 euros. En Arden B, y por 24 dólares, hemos dado con este otro collar que forma los flecos con semillas doradas. Vale, no son lo mismo que el de Kiki de Montparnasse, pero representan la tendencia en la calle. Aquí tienes también una versión en pulsera de plata.

Por último, y para fanáticos de este accesorio capilar, no podemos evitar recomendar estas útiles y muy recomendadas por cualquier oftalmólogo gafas con flequillo. Con pequeñas cadenas doradas que cuelgan de las monturas, no garantizan ningún tipo de visión, pero sí que se den la vuelta cuando camines con ellas por la calle... si es que no te caes al suelo antes y te miran por eso.

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.