Amigos del Canal de Castilla reclaman un proyecto serio para este espacio

Valladolid.-  Un proyecto serio que recupere la actividad en el Canal de Castilla y que lo convierta en el elemento vertebrador del territorio que fue en el pasado reclaman desde la Asociación de Amigos del Canal "La Barcaza", que desde 2005 promueve actividades para "evitar el olvido de esta obra".

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(EFE)

La Asociación de Amigos del Canal "La Barcaza", que desde 2005 promueve actividades para "evitar el olvido de esta obra", reclaman un proyecto serio que recupere la actividad en el Canal de Castilla y que lo convierta en el elemento vertebrador del territorio que fue en el pasado. En la imagen dos patos nadan junto a una vieja lavadora tirada a las aguas del canal.

El presidente de esta asociación, Miguel Ángel Guerra, habla, en declaraciones a Efe, de "la mala política que se lleva a cabo desde administraciones e instituciones" con este espacio, y critica que los proyectos que existen en la actualidad "sólo cubren la parte del territorio que le interesa a cada uno".

Para Guerra, la solución sería un plan íntegro que rehabilite las estructuras del canal y permita dotar de un modelo turístico sostenible a este espacio, "aunque siempre respetando las utilidades que tiene ahora, que básicamente son regadío y abastecimiento de agua a la población".

En Canal de Castilla es una obra de ingeniería plasmada en los siglos XVIII y XIX, que fue construida para facilitar el transporte de mercancías hacia los puertos del norte de España, y que transcurre a lo largo de 207 kilómetros por las provincias de Valladolid, Palencia y Burgos.

Las obras para su construcción se iniciaron el 16 de julio de 1753 bajo la dirección de los arquitectos Antonio Ulloa y Carlos Lemour, y pasó casi un siglo hasta que en 1850 la denominada Sociedad Anónima del Canal pudo comenzar a explotar los recursos del mismo.

Guerra explica que este proyecto llegó tarde en su día, pues pronto el ferrocarril acabó con la actividad del canal al ser más rápido y más económico.

El presidente incide en la necesidad de una idea que salve al Canal de Castilla de "llegar tarde otra vez", pues actualmente ya hay varias de estas infraestructuras en centroeuropa "muy preparadas y rehabilitadas".

Destaca algunas como el Canal del Mediodía francés, que une el río Garona en Toulouse con el mar Mediterráneo, y que "es totalmente navegable y ha auspiciado un turismo responsable que sería interesante aplicar en este canal".

En este sentido, aboga por la creación de una red de albergues en las márgenes del canal que podría suponer el germen de una ruta como lo es actualmente el Camino de Santiago, o la habilitación de sendas que fomenten el ciclismo, montar a caballo o la navegabilidad.

Como explica Guerra, un barco cargado de harina que partiese en su día desde Valladolid, llegaría a Alar del Rey, punto final del canal, aproximadamente diez días después.

Para seguir su camino, cada embarcación debía pasar por una serie de esclusas que se llenaban o vaciaban de agua hasta aumentar o disminuir su nivel, y así permitir continuar su ruta a las barcas.

Guerra afirma que la Confederación Hidrográfica del Duero cuida el estado del canal para que siga proporcionando agua a la población y regadío al campo, pero asegura que hace falta un plan integral de rehabilitación que salve al canal de la ruina y el olvido.

Precisamente, para evitar que se impongan estos dos factores, desde la asociación "La Barcaza" se mantienen firmes en sus demandas a las instituciones responsables del Canal de Castilla, con una actitud que, por ejemplo, el pasado verano les reportó una alegría al lograr que se restituyera la iluminación en el punto de partida en Valladolid.

Organizan, además, una serie actividades de cara a dar a conocer el patrimonio natural, como exposiciones y concursos de fotografía, una regata de piragüismo o una marcha medioambiental para escolares.

"Nos lleva mucho tiempo prepararlo, porque no somos muchos, especialmente a la hora de arrimar el hombro", concluye Guerra, aunque sostiene que desde que se creó la asociación en 2005, todos los miércoles se han reunido en su sede en el barrio de La Victoria para hablar de sus planes y, por supuesto, del Canal de Castilla.