El vicepresidente de Ecuador dice que EE.UU. no puede intervenir en los asuntos internos

Quito.-  El vicepresidente ecuatoriano, Lenin Moreno, justificó hoy la expulsión de un alto cargo de la Embajada de Estados Unidos en Quito, por considerar que ese país no tiene el derecho para intervenir en asuntos internos de Ecuador.

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(EFE)

El Vicepresidente de Ecuador, Lenín Moreno, Moreno señaló que la decisión de su Gobierno busca normalizar la relación bilateral y poner "claras" las competencias de cada institución. EFE/Archivo

Moreno señaló a periodistas que la decisión de su Gobierno busca normalizar la relación bilateral y poner "claras" las competencias de cada institución.

El Gobierno de Ecuador expulsó el miércoles al primer secretario de la embajada de Estados Unidos, Max Sullivan, a quien señaló de inmiscuirse en los asuntos internos de la Policía Nacional.

Una forma de establecer una buena relación se sustenta en "el hecho de poner las cosas claras", remarcó Moreno, quien insistió en que ningún diplomático extranjero puede mantener una injerencia en instituciones nacionales, como la Policía.

"Nosotros no intervenimos jamás en la política norteamericana, en su seguridad, y ellos (los estadounidenses) no tienen el derecho de intervenir en la nuestra", remarcó el vicepresidente ecuatoriano.

De su lado, la jefa de prensa de la Embajada de EE.UU., Martha Youth, dijo que Sullivan respetará la decisión del Gobierno ecuatoriano y que abandonará el país dentro del plazo que tenía para hacerlo.

Youth señaló a la emisora Radio Quito que ese plazo se cumple el sábado, aunque no especificó si el funcionario ya abandonó el país.

Sullivan es el segundo cargo de la Embajada estadounidense en ser expulsado de Ecuador en menos de un mes, luego de que, a inicios de febrero, fuera declarada persona non grata el agregado de esa legación, Armando Astorga, por las mismas causas de supuesta intromisión en asuntos internos.

Astorga fue expulsado después de que se revelara una carta suya, dirigida a la Comandancia de la Policía, en la que daba por terminado un convenio verbal de apoyo a dos unidades especiales de esa institución.

El suceso escaló de proporción, cuando el Gobierno reclamó la información reservada que contenían unos ordenadores entregados a las autoridades estadounidenses, equipos que habían sido cedidos por la Embajada a las unidades policiales ecuatorianas.

Por su parte, el ex canciller ecuatoriano José Ayala dijo a Radio Quito que la expulsión de Sullivan, así como del agregado estadounidense Armando Astorga, no es una medida que convenga a Ecuador.

Ayala se refirió sobre todo a la reacción del Departamento de Estado de EE.UU., que calificó la expulsión de los dos diplomáticos como un hecho poco amistoso e inexplicable.

"La reacción del Departamento de Estado nos está hablando de que hemos entrado en un campo de confrontación, que no es el que más conviene a los intereses ecuatorianos", expresó Ayala.