Periodismo de risa

Fernando González Urbaneja, presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), critica con dureza el vídeo de Wyoming y la becaria, y no duda en asegurar que "desprestigia la profesión periodística". ¡Ya iba siendo hora de que alguien levantase la voz y denunciase la degradación de los profesionales de la información! Un tipo con dos cojones este Urbaneja. Porque la verdad es que hay que tenerlos muy bien puestos para denunciar a un humorista por desprestigiar la profesión periodística.

Oscar Espiritusanto (Flickr)

¿Estamos los periodistas en buenas manos?

El descomunal porte de los atributos masculinos de Urbaneja no es cosa nueva. Viene de lejos. Ya los tenía como el caballo de Espartero, estarán ustedes de acuerdo conmigo, cuando sólo un par de años después del atentado del 11 de marzo en Madrid entregó el V Premio de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) a Pedro J. Ramírez. Urbaneja y sus dos mastodónticas criadillas destacaron "la defensa permanente de la libertad de expresión" del director del periódico que informó a los españoles sobre el ácido bórico y la Orquesta Mondragón.

Pero eso del 11-M y demás zarandajas son asuntos menores dentro de esta hermosa profesión, ¿verdad?. El auténtico problema del periodismo son, reconozcámoslo, los humoristas. Wyoming, Faemino y Cansado, los chavalotes de Muchachada Nui... No los reporteros de guerra que escriben las crónicas, con el consentimiento de sus directores, desde un sillón de sus casas. No quienes jamás contrastan una información. No quienes utilizan el nombre de la investigación en vano. No quienes utilizan televisiones y radios públicas como instrumentos de propaganda. No quienes insultan y manipulan a diario. No quienes jamás consentirían que la verdad les impidiese vender más periódicos.

Los humoristas, malditos sean, están acabando con el periodismo. Gracias a Dios ha venido Urbaneja, arrastrando su descomunal paquete testicular desde la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid, para recordárnoslo. Los periodistas podemos estar tranquilos: estamos en buenas manos.

De cualquier manera, algún día deberíamos hablar del auténtico periodismo de nuestros días. Del periodismo de los periodistas, no del periodismo de los humoristas. Ese de las trampas, engaños y desprestigios que Urbaneja debería denunciar un día sí y otro también. Si yo les contara... tendría que utilizar la épica y el lirismo del replicante malherido bajo la lluvia: "He visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir..."

Un motivo para no ver la televisión.

Como cada miércoles publicamos un podcast en el que Albéniz pincha su música favorita. Country, blues y, por supuesto, rock and roll. Dale al play y a disfrutar.