Una treintena de muertos en enfrentamientos entre milicias rivales somalíes

Mogadiscio.-  Al menos treinta personas murieron, y más de cincuenta resultaron heridas en enfrentamientos registrados hoy entre dos milicias islámicas rivales en Guriel, en la región central de Somalia, confirmaron a Efe fuentes locales.

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(EFE)

Miembros de un clan somalí buscando restos de compañeos de su milicia en la región de Dhusamareb el pasado junio.

Los combates tuvieron como protagonistas a Al-Shabab, grupo integrista islámico, ala militar de la antigua Unión de Tribunales Islámicos (UTI) que durante 2006 controló todo el sur de Somalia, y la milicia rival, relativamente moderada, Ahlusunna.

Ahmed Hassan, un médico del hospital Dhusamareb dijo que los heridos han sobrepasado la capacidad del centro sanitario.

"Cincuenta y dos personas fueron ingresadas en este hospital, la mayoría de ellas civiles y la situación es crítica", dijo Hassan, quien puntualizó que Guriel se encuentra a 40 kilómetros pero que no se sabe si hay más heridos en el pueblo que no pueden llegar a la clínica por falta de transporte.

Vecinos de Guriel dijeron, por su parte, que la lucha comenzó después de que Al-Shabab atacara los campamentos de Ahlusunna en la localidad.

"Huimos de nuestras casas y tratamos de escondernos, pero los pequeños árboles (del pueblo) no brindan suficiente protección. Las balas perdidas han matado a muchos, he visto los cadáveres de 20 personas", dijo Habibo Mohamed, una joven madre de dos niños, quien puntualizó que "no hay manera de llevar los heridos al hospital".

El líder del grupo Ahlusunna, Sheikh Abdulrasak Yusuf Adan, se adjudicó la victoria sobre la milicia Al-Shabab.

"Hemos derrotado a ese violento grupo. No son bienvenidos (en Guriel) y los estamos persiguiendo a las afueras del pueblo", afirmó Adan, que añadió que sus efectivos dieron muerte a una treintena de militantes de Al-Shabab.

Sin embargo, el portavoz militar de Al-Shabab, Sheikh Mukhtar Robow Ali, más conocido como "Abu Mansoor", rechazó las aseveraciones de su rival.

"Al-Shabab dio muerte a 40 oponentes en Guriel. Ellos se dicen musulmanes pero son seguidores de Etiopía", dijo Robow Ali, que puntualizó que su milicia no aceptará que ningún grupo "juegue una carta política en la religión".

Fuentes independientes dijeron a Efe que funcionarios de alto rango de Al-Shabab resultaron muertos en los combates.

"Hay altos cargos de Al-Shabab muertos aquí. Son extranjeros, uno de ellos es delgado y nos parece europeo, pero no tenemos manera de confirmarlo", dijo uno de los residentes, que solicitó permanecer en el anonimato por razones de seguridad personal.

Los enfrentamientos entre las dos milicias comenzaron en noviembre pasado cuando Al-Shabab asesinó a un líder religioso del grupo Ahlusunna en momentos en que salía de una mezquita de Mogadiscio donde minutos antes había denunciado como "equivocada" la "yihad" (guerra santa) de Al-Shabab contra el Gobierno somalí y las tropas etíopes que lo respaldan.

Los efectivos etíopes destacados en Somalia iniciaron el pasado día 3 la retirada de Mogadiscio, mientras miembros de las milicias islámicas moderadas ocupan las comisarias de la ciudad, para evitar un vacío de autoridad.

El presidente interino de Somalia, Sheikh Aden Madobe, dijo este sábado que Al-Shabaab es "la mayor amenaza a la estabilidad" en el país y pidió la ayuda internacional para crear unas fuerzas de seguridad locales eficaces.

El llamamiento de Madobe fue respaldado por la Unión Africana (UA) que subrayó que la comunidad internacional tiene que redoblar sus esfuerzos para establecer una fuerza militar gubernamental de 10.000 efectivos en Somalia para respaldar el proceso político de pacificación del país.

En un comunicado emitido desde Addis Abeba, su sede permanente, la UA confirmó que el Gobierno Federal de Transición somalí y la moderada Alianza para la Nueva Liberación de Somalia han acordado elegir un nuevo presidente del país, en reemplazo de Abdullahi Yusuf Ahmed, que renunció el pasado 29 de diciembre.

El proceso de elección se llevará a cabo entre los días 20 y 26 de enero en la vecina Yibuti, donde se desarrollan desde el año pasado las negociaciones para pacificar Somalia.