La cosa va de ex presidentes: de la Casa Blanca a Aznar

"Suárez tenía una regla que me parece muy interesante: los ex presidentes no están para llamar sino para que les llamen". Lo dice José María Aznar en una gran entrevista que le ha hecho Vanity Fair en Washington. Y como si le hubieran escuchado —será cuestión de la cercanía física—, ahí están en la foto del día Carter, Bush padre, Clinton y Bush hijo, los cuatro presidentes estadounidenses vivos, que han acudido a la llamada de Obama. Sí, los ex presidentes están para que les llamen...

(REUTERS)

Todos los presidentes juntos en la Casa Blanca.

Al fin y al cabo, y cada día es más evidente, el peso de sus opiniones sigue vivo, más en unos casos que otros. Cada vez que Aznar abre la boca siempre ofrece titulares. En Vanity Fair da unos cuantos. "De eso se queja su núcleo duro. Y del efecto altavoz. Es decir, de que cada palabra o cada frase de Aznar se amplifique en los medios. Es cierto que concede poquísimas entrevistas, pero de una forma u otra deja claro lo que le gusta y lo que no. Con frases o silencios", explica en la entrevista Lourdes Garzón, la directora de la edición española de la mítica revista.

¿Cuál debe ser el peso de los ex presidentes y su presencia pública? Por ejemplo, a Felipe González quizá le gustaría tener menos de la que tiene últimamente. Pero, igual que Aznar, también desarrolla una gran actividad que le da para vivir bastante bien. Ambos se dedican, entre otras cosas, a dar conferencias muy bien remuneradas. Calvo-Sotelo ha muerto en 2008 y Suárez vive con su enfermedad, en el más absoluto anonimato, protegido por su familia. Son los otros dos ex presidentes españoles.

Los presidentes estadounidenses siguen muy activos y, también como los españoles, unos más que otros. George W. Bush empieza a ser más ex que presidente; Bill Clinton es consorte, aunque manda tanto que ha tenido que hacer pública la lista de donantes a su fundación; y Carter y Bush padre son ahora más populares que cuando se retiraron —una encuesta de la CNN muestra hoy cómo el tiempo ha sido benévolo con ellos—.

Esto viene al caso porque, por primera vez en 27 años, se han reunido todos los presidentes americanos, incluido Obama, en la Casa Blanca. Compartieron un almuerzo durante una hora y Obama agradeció a Bush el haber accedido a ser el anfitrión de "esta extraordinaria reunión" en la que esperaba recibir "buenos consejos y camaradería" de sus predecesores. Antes del encuentro, Obama y Bush se reunieron a solas en el Despacho Oval, en una conversación en la que se esperaba que hablaran acerca de la situación económica y Oriente Medio. El día 20 de este mes Obama ya será el 'dueño' de la casa y Bush, un ex presidente más.