Indonesia ejecutará en noviembre a los tres islamistas de los atentados de Bali

Yakarta.-  Los tres islamistas condenados a muerte por los atentados cometidos en Bali en 2002, que costaron la vida a 202 personas, serán fusilados a "principios de noviembre", indicó hoy la Fiscalía General de Indonesia (AGO).

Jasman Panjaitan, responsable de comunicación la fiscalía, aseguró en una conferencia de prensa que el ministro de Justicia, Andi Mattalata, "ya ha firmado los documentos precisos" para la ejecución de Imam Samudra, Ali Gufron y Amrozi, miembros de la organización islamista Yemaa Islamiya (YI), considerada el brazo de Al Qaeda en el Sudeste Asiático.

"La decisión ya está tomada, el proceso ha concluido", sentenció, recordando que los condenados han agotado todos los vías legales posibles desde que fueron sentenciados a muerte en octubre de 2003.

Desde entonces se han sucedido tres recursos fallidos a distintas instancias judiciales y una petición al Tribunal Constitucional indonesio, también rechazada, por la que los reos solicitaron, en lugar de ser fusilados, ser decapitados, ya que en su opinión este método es más acorde con la jurisprudencia islámica.

No obstante, aún queda por fijar la fecha y el lugar concretos en la que se fusilará a los tres condenados, según confirmaron a Efe fuentes de la AGO, ya que ésta es una decisión que debe tomar la propia fiscalía basándose "en razones de seguridad nacional".

Estas fuentes señalaron asimismo que la Policía Nacional de Indonesia está "siguiendo día a día" los movimientos de los grupos radicales dentro del país y que "está calculando la posibilidad de una reacción" violenta.

A este respecto, cinco personas fueron detenidas esta semana en Yakarta, la capital, y sus alrededores acusados de pertenecer a una célula radical que pretendía volar con explosivos un depósito de combustible.

Recientemente, Imam Samudra declaró a la revista radical "Yihadmagz" que esperaba que hubiese más atentados "como represalia" si él y sus dos compañeros eran ejecutados.

Siguiendo el procedimiento legal pertinente, que data de 1969, los tres condenados a muerte serán informados de la fecha de la ejecución con tres días de antelación, y serán a continuación aislados.

Puede que la Fiscalía General no haga público este paso final del proceso judicial, aunque sí que se lo comunica a las familias.

Según aseguró ante los medios Jasman Panjaitan, el fusilamiento se llevará a cabo en un lugar indeterminado de Cilacap, la pequeña isla deshabitada donde se encuentra la cárcel de máxima seguridad de Nusakambangan, donde permanecen encerrados los tres islamistas.

Con este anuncio, el Ejecutivo indonesio rompió su práctica habitual de comunicar las ejecuciones una vez que han sido llevadas a cabo y dio a entender que el tortuoso proceso judicial contra los autores de la masacre de Bali de 2002 está zanjado.

Sin embargo, esta misma semana los abogados de los tres reos anunciaron que en los próximos días estarían en disposición de presentar una nueva apelación en nombre de las familias de los condenados que podría reabrir el proceso.

Estos islamistas son los únicos tres de los 33 condenados por el mayor atentado de la historia de Indonesia a los que se les aplicará la pena capital.

La tragedia tuvo lugar el 12 de octubre de 2002, y consistió en tres explosiones consecutivas de bombas, dos en una concurrida zona de bares y restaurantes para extranjeros, y otra, de escasa potencia pero de gran significado, frente al consulado de Estados Unidos en Bali.