Con las botas puestas (y por encima de la rodilla)

Cada invierno se hace imprescindible tener un buen par de botas que se puedan combinar con faldas, pantalones, vestidos y todos los looks posibles, además de abrigarnos en los días más fríos. A pesar de que el cambio climático nos está privando de inviernos en condiciones, nuestra propuesta para esta temporada son unas botas que te cubrirán mucho más de lo que ninguna lo había hecho antes: son aquellas con la caña por encima de la rodilla, una mezcla de mosquetero y Pretty Woman que nos puede proporcionar unos looks mucho más glamourosos y urbanos de lo que nos podíamos imaginar.

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Las botas con la caña por encima de la rodilla siempre habían estado relegadas a profesiones muy concretas como la de tercio de Flandes, aquella que desempeñaba Julia Roberts en esa famosa película de los 90 o para fanáticos del fetish. Con el tiempo, este calzado se ha ido quitando todas las connotaciones mosqueteras y sexuales para empezar a formar parte del estilismo de tendencia a pesar de lo arriesgado de la propuesta.

Y es que no es lo mismo llevar estas botas en su versión de charol, punta afilada y tacón de 12 centímetros, que de ante y con pitillos. Una vez más, Kate Moss se ha adelantado un año entero con excelentes resultados. Recientemente, hemos visto también a Madonna, aunque con una imagen algo más sado-maso; sin duda, últimamente es su calzado preferido. Incluso la Beckham se ha apuntado a estas botas para cubrir sus finísimas piernas, aunque su modelo futurista de Antonio Berardi de tacón invisible es más una frikez que otra cosa.

Sin duda, si tenemos que elegir cómo combinar unas botas de caña altísima, el modelo a imitar sería Kate Moss, con pitillos, aunque no perdamos de vista la combinación con un elegante y vaporoso vestido de Alexa Chung, mucho más chic. El look urbano también es posible con estas botas si optamos por unas planas y en colores más naturales como la gama de los marrones, muy sobrio y elegante para el día a día. Sobre las pasarelas encontrarás muchos ejemplos de cómo llevar estas botas con estilo y sin equivocarte. ¡Si hasta el New York Times se ha hecho eco de la tendencia!

Estas botas no son las más abundantes en las tiendas, aunque si las firmas más célebres de calzado ya las han sacado, las zapaterías habituales de todas ciudades pronto tendrán interesantes imitaciones. Donde ya las tienes seguro es en H&M (ver cuarta foto empezando por abajo), con pinta de ser bastante elásticas y aptas para casi todas las piernas y bolsillos. En el catálogo de La Redoute tienen una súper oferta de botas imitando a ante completamente planas por 63 euros, ideales con vaqueros pitillos o minifalda para el día a día.

Una vez más te recomendamos que recurras a la red para encontrar una mayor variedad de modelos, precios y calidades. No tengas miedo a no poder probártelas: si tienes claros los tallajes internacionales y habitualmente no tienes problemas con las cañas de las botas, ni lo dudes. Puedes empezar a comprar en Miss Selfridge, que tiene las más chic de todas en ante negro con detalles en charol y un tacón alto con aspecto de ser muy cómodo. Para ser 100% piel, 85 libras no es un precio nada descabellado. Muy similares son éstas de ASOS, pero en plano, diez libras más baratas y en negro y marrón aunque apenas superan ligeramente la altura de la rodilla.

Sube de precio, pero también tiene un estilo más clásico que te durará unas temporadas este modelo de Pour La Victoire de 352 dólares. Excelentes hasta para las más recatadas. Hasta el infinito y más allá llega la caña de estas botas ajustadísimas de ante gris de Halston, cuyo precio es tan elevado como ellas mismas: 1.335 euros.

La casa de subastas eBay es una gran opción para adquirir este tipo de botas, y en ella hay desde modelos de segunda mano de los años 70 hasta nuevos de estos días, todos ellos infinitamente más asequibles que los dos que te hemos mostrado antes. Basten como ejemplo estas sencillas botas corsarias negras de Michael Kors que parten de 22 dólares; por mucho que aumenten las pujas, no llegarán a los 600 que cuestan originalmente.

Una propuesta muy sencilla y original para aquellas que no se atrevan a comprarse unas botas tan altas es emularlas. No tienes más que ponerte unas medias por encima de la rodilla —o calzas— y después unas botas de caña normal. Una muestra: Alexa Chung en el pasado festival de Glastonbury. Fácil, juvenil y efectivo.

La línea que divide lo macarra y lo chic se cruza muy fácilmente con este tipo de botas, y algunas marcas han pegado grandes patinazos buscando la originalidad. Mira por ejemplo el modelo Carnaby de Stuart Weitzman, decorado con dos horripilantes hebillas más tachuelas más plataforma; parecen las botas que llevaría Steven Tyler si fuera mujer. Christian Louboutin lanzó el año pasado esta maravilla que es un auténtico festival de la tachuela y que se vendía al precio de 2.300 dólares. Manolo Blahnik tampoco ha sabido adaptarse muy bien y pretendía vendernos estas botarras con la parte superior calada y acabadas en punta; ni Sarah Jessica Parker en sus peores momentos se atrevería con semejante engendro.

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.