Fin de fiesta

Bueno, pues se acabó. Se han terminado los Juegos. Y en esto que llamamos casa nos hemos quedado un poco mustios. No porque se hayan acabado, que también. Ni por el arbitraje de la final de baloncesto, que también, aunque quejarse de los árbitros sea de lloricas. Es por otras cosas. La nariz de la princesa, por ejemplo.

(EFE)

A la princesa Letizia le han operado el tabique nasal porque le causaba unas molestias al respirar. Eso dice la tele. Y le ha quedado una nariz muy fina. Lo curioso es que al Ahmed también le operaron la nariz el año pasado (y una pierna, y la tira de cosas, pero eso no importa ahora) después de una castaña que tuvo con la moto, y se la dejaron hecha un boñigo. El Ahmed ahora se queja porque dice que si a él también le hubieran operado por lo privado (parece que la princesa no ha pasado por el Seguro), le habría quedado una naricilla como la de Brad Pitt, o al menos como la de Letizia.

Para mí que la princesa se ha hecho la cirugía estética y lo del tabique es un invento, pero el Ahmed me mira como si estuviera loco y dice que no, que cómo va a mentir la Casa Real (en serio, les llama «la Casa Real») en una cosa así. Ay, el Ahmed, lo listo que es para algunas cosas, y qué memo es para otras. Total, que la culpa es del Seguro, o sea del gobierno, o sea de Zapatero, por no haberle arreglado la nariz cuando tuvo ocasión. El Ahmed es así, no hay nada que hacer. Sólo tener paciencia, y esperar a que se le pase la tontería.

Yo, en cambio, estoy mustio por los chinos. No sé si ahora, después de los Juegos, tendrán más democracia, como decía Samaranch. Yo diría que no. Pero bueno, da igual. Lo que me preocupa es que son muchos. Cada día había millones de voluntarios llenando los estadios, millones de voluntarios en la calle para decir a la prensa extranjera que el gobierno era estupendo, millones de figurantes en las ceremonias… Un mogollón de chinos para cualquier cosa. Si tienen tanta gente tocándose los huevos hasta que les llaman para ayudar en los Juegos, digo yo, no querrán inmigrantes. Y si no quieren inmigrantes, no sé qué va a ser de nosotros.

Aquí pinta mal. Mañana saldremos a ver cómo está lo del curro y a ver si pillamos algo, aunque sea fregar platos. ¿No necesitarán figurantes para los Juegos de Londres?