No podemos negar nuestras afinidades ni esconder nuestras faltas: sí, nos gustan Los Tigres del Norte ¿y qué? Así que cuando anunciaron su nueva gira nos ceñimos el cinto y agarramos la furgoneta hasta Barcelona para sumergirnos en un (in)mundo de violencia gratuita y machismo... Y, aunque no pudimos agarrarnos en una balacera en mitad del Apolo con otro fan de Los Tigres, nos lo pasamos muy bien coreando 'Jefe de Jefes' o 'Le compré la muerte a mi hijo'.
Si no ha tenido la oportunidad de asomarse por alguno de sus conciertos en España, los Infames estamos aquí para remediarlo, así que prepárese un tequilita sunrise bien fresquito y busque la sombra de un nopal antes de leer nuestras nuevas recomendaciones:
La primera de ellas es la vibrante 'Trabajos del reino' (Periférica, 2008), en la que Yuri Herrera nos adentra en la mansión de un narcotraficante (El Rey) de la mano de un cantante de narcocorrido conocido como 'El Artista', quien narra -¿canta?- la gloria y caída de todos los miembros del cartel. El lenguaje del narrador es pura lengua viva, un ritmo continuo y sorprendente que parte de lo popular para articular una historia trágica... como un corrido: «Mejor quisieran oír nomás la parte bonita, verdá, pero las de acá no son canciones para después del permiso, el corrido no es un cuadro adornando la pared. Es un nombre y es un arma.» Ya estamos esperando la siguiente obra del editor de «El perro», una de las mejores revistas literarias (para los abajo firmantes) que uno puede echarse al ojo.
Pero si nos entusiasmó 'Trabajos del reino' ¿qué decir del último libro de Juan Villoro? ¡Qué fans somos de Villoro! «Los culpables» (Anagrama, 2008) es un conjunto de cuentos excepcionales por los que transita una completa galería de vidas a la deriva en busca de redención.
Si lo traemos hasta aquí es para hablarles del relato «Mariachi», en el que Villoro nos presenta la historia de El Gallito de Jojutla, artista universal a su pesar y resignado ídolo de multitudes. Y es que la vida no le dejó otra opción que ser mariachi, algo que irremediablemente le ata al diván de su psicoanalista. La historia de nuestro artista se complica cuando aparece en escena el realizador español Chus Ferrer (umh…¿trasunto de 'nuestro manchego universal'?), quien se enamora hasta las trancas del cantante y decide convertirlo en una estrella gracias a una tórrida escena homosexual con un motorista catalán. La magia del cine (y de las prótesis peneanas) convertirán al Gallito en un icono sexual, un mariachi pegado a un descomunal miembro que le acompañará como una maldición allá donde vaya. Todo este bizarro y divertido galimatías no se resolverá hasta que entre en escena Brenda, a quien no le importa la verdadera dimensión del «instrumento» del Gallito.
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Les hacéis más justicia a los Tigres que el juntaletras galdosiano de cuyo nombre no quiero acordarme. +
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
Tópicos, realidades y estereotipos cazados a vuelva pluma por las calles de Madrid
En: El País
Recomendación: Diego Bayón
Uno de cada tres jóvenes accede a Internet desde su teléfono móvil. Aunque sea casi imposible conseguir el dato, cada vez es más frecuente encontrarse a personas con un iPhone en sus manos en cualquier lugar. O de cualquier otro dispositivo móvil con acceso a Internet. Terminales multidispositivo que han están cambiando radicalmente el comportamiento del usuario.
En: E-Campanya
Recomendación: Albert Medrán
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.