Beitia cree que en la final podrá estar en su récord España y cerca de la medalla

Pekín.-  La cántabra Ruth Beitia afirmó, tras clasificarse para la final de salto de altura de los Juegos Olímpicos de Pekín, que cree que está en condiciones de batir su récord de España (2,02) y por tanto próxima al podio.

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(EFE)

La española Ruth Beitia durante la clasificación de la prueba de salto de altura de los Juegos Olímpicos de Pekin. EFE/Alberto Estévez

Beitia fue una de las quince clasificadas para la final del sábado tras lograr una marca de 1,93, en su caso sin haber cometido ni un solo fallo pese a las difíciles condiciones meteorológicas por la constante lluvia, que incluso obligó a aplazar durante una hora el inicio de la prueba.

"Ha sido dura", reconoció la española, quien no obstante, explicó que ya lo tenían previsto y preparado desde la víspera y lamentó que los jueces parasen la clasificación en vez de continuar con 1,96 para dejar a las doce finalistas.

Esta decisión de permitir el acceso a las quince saltadoras que habían rebasado el 1,93 benefició indudablemente a la rusa Elena Slesarenko, una de sus grandes rivales para estar en la lucha por el podio.

"Qué lástima. Nos han parado la prueba. Yo creo que se quedaba fuera, pero bueno, así es esto, habrá que pelear", dijo Beitia sobre Slesarenko, quien sufrió mucho para rebasar al tercer intento 1,93 y que cuando le comunicaron que estaba en la final lo celebró con gestos palpables de alegría.

Beitia, quien mandó "un beso" a la también saltadora de altura Marta Mendía, compañera de tantas selecciones, y a la ochocentista Mayte Martínez, ausentes de Pekín y a las que dijo que habían echado mucho de menos, se mostró muy satisfecha de cómo había competido en la previa.

"Lo veo bien, con muchísimas ganas. He afrontado bien una prueba que era muy dura. El nivel ha estado ahí. Hay gente que ha fallado. Vlasic ha hecho un nulo, Slesarenko las ha pasado mal...", afirmó la cántabra.

En su opinión si hoy hubiera sido la final "estaría muy alto", pero "ahora hay que recuperar" y preparar la final. "Estoy bien y si Dios quiere podré estar en el récord de España, que si no es medalla será muy cerquita", dijo Beitia, quien consideró que la principal diferencia respecto a los Mundiales de Osaka'07, en los que se tuvo que conformar con la sexta plaza, es que aprendió "de lo decepcionada" que se marchó y que ahora es "más madura".

Aún no sabe qué alturas hará de partida en la final. En la clasificación superó todas las que fue marcando la organización (1,80, 1,85, 1,89 y 1,93) sin reservarse en ninguna. "El día no estaba tampoco para jugártela en ningún momento", precisó.

Respecto a la lucha por las medallas, y al margen de la 'dueña' de la competición, la croata Blanka Vlasic, comentó que "hay mucha gente con 2,03, también con 2,02, con 2,00 y un grupito de 98 (1,98). La final está abierta, pero habrá que esforzarse al máximo, pelear y a ver qué pasa".