Rubalcaba dice que el PP busca entorpecer la reforma de un sistema que fue un fracaso

Oviedo.-  El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha acusado hoy al PP de intentar "entorpecer" la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, que, ha subrayado, pretende mejorar el modelo aprobado por el Gobierno de José María Aznar, "que se ha constatado que fue un fracaso".

En rueda de prensa, Rubalcaba ha señalado que el objetivo de los populares con su solicitud de comparecencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, era "dificultar" la posibilidad de que se alcance un acuerdo "que será difícil y complejo", pero que se ha mostrado convencido de que se alcanzará.

A su juicio, lo "razonable" es que en el Parlamento comparezca "la persona que lleva las negociaciones", el vicepresidente económico, Pedro Solbes, aunque ha advertido de que "nada dificulta más" un proceso de este tipo "que empezar a discutir sobre él cuando aún no se ha terminado".

Para el titular de Interior, se trata de "un debate muy serio, no de una pelea entre administraciones" y afecta "a la vida de los ciudadanos" ya que los fondos que reclaman las distintas comunidades "no son para burocracia, sino para mejorar la sanidad o la enseñanza".

Rubalcaba ha demandado del PP "prudencia" en torno a esta cuestión, ya que en las negociaciones participan comunidades gobernadas por presidentes de esta formación que, a su juicio, han "certificado", al igual que sus homólogos de las autonomías socialistas, que el sistema hasta ahora vigente "fue un fracaso".

"No hay voluntad de transparencia en el PP, y cuando ellos negociaron la financiación nadie les pidió explicaciones" hasta que no se resolvió con acuerdo, ha advertido el ministro, antes de pedir que no se "dramatice" una cuestión "que es difícil" y en la que los populares "no quieren ayudar" sino "entorpecer".

Respecto a la incidencia que este proceso pueda tener en la tramitación de los Presupuestos del Estado, el ex portavoz del PSOE en el Congreso se ha mostrado convencido de que los grupos de la Cámara "se comportarán con sentido común" y posibilitarán su aprobación, "importantísima en la actual situación económica".