Ex militares que aniquilaron un grupo guerrillero piden una indemnización en Brasil

Río de Janeiro.-  Al menos 175 ex militares que participaron en las operaciones con que la dictadura brasileña (1964-1985) aniquiló la llamada guerrilla del Araguaia han exigido ante la justicia indemnizaciones por los daños morales y físicos sufridos en el combate, informó hoy el diario Folha de Sao Paulo.

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(EFE)

Los demandantes alegan que por orden superior y sin preparación adecuada tuvieron que participar en la década del setenta en operaciones de persecución, captura, retención y muerte de guerrilleros.

Los demandantes alegan que por orden superior y sin preparación adecuada tuvieron que participar en la década del setenta en operaciones de persecución, captura, retención y muerte de guerrilleros, según el informe divulgado por el diario paulista.

De acuerdo con la versión periodística, otros 425 ex soldados y ex suboficiales ya tienen listas demandas idénticas para reivindicar indemnizaciones por los supuestos daños morales, físicos y psicológicos sufridos.

Cada uno de los demandantes exige una indemnización promedio de 500.000 reales (unos 312.500 dólares).

En caso de que la justicia acate las 600 peticiones, el Estado tendría que desembolsar cerca de 300 millones de reales (unos 187,5 millones de dólares) para indemnizar a los ex militares.

La guerrilla de la Araguaria fue el nombre con el que se conoció el foco guerrillero que el entonces proscrito Partido Comunista de Brasil (PC do B) instaló en la región amazónica de la Araguaia para combatir al régimen militar brasileño.

Al menos 59 de los cerca de 80 miembros de dicho grupo guerrillero murieron o desaparecieron en la Amazonía durante combates con fuerzas del régimen militar entre 1972 y 1974, y los demás fueron capturados.

En tres diferentes operaciones militares, en las que llegaron a participar unos 12.000 soldados, las Fuerzas Armadas eliminaron por completo el foco subversivo.

Muchos de los guerrilleros desaparecidos al parecer murieron tras ser arrestados y sus cuerpos nunca aparecieron.

Uno de los pocos guerrilleros que sobrevivió es el actual diputado José Genoino, quien llegó a ser presidente del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) y es importante correligionario del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.

A diferencia de los militares, el Estado brasileño ya ha reconocido su responsabilidad por las muertes y desapariciones forzosas en la Araguaia y ha autorizado el pago de indemnizaciones a los familiares de los guerrilleros.

Los ex militares que hoy exigen indemnizaciones, en su mayoría desvinculados de las Fuerzas Armadas cuando terminaron las operaciones, alegan sufrir secuelas psicológicas originadas de las operaciones que supuestamente realizaron sin entrenamiento adecuado y en condiciones infrahumanas.

Los demandantes aseguran que sufren problemas crónicos como insomnio, crisis de pesadillas, dificultades de socialización y hasta principio de locura.

Los que exigen indemnización por daños físicos aseguran que sufrieron amputación de miembros, fracturas mal reparadas que terminaron perjudicando su salud, lesiones permanentes provocadas por heridas de tiros o caídas y hasta ceguera.

Las demandas fueron presentadas ante diferentes tribunales federales y en algunos casos el Estado, a través de la Abogacía General de la Unión, ya ha presentado su defensa y alegado que los demandantes no consiguen comprobar su estado de invalidez o de problema psicológico.