Cristina Fernández está "preocupada" por la situación de Bolivia y confía en la normalización

Buenos Aires.-  La presidenta argentina, Cristina Fernández, expresó hoy su "preocupación" por los incidentes registrados en Bolivia que la obligaron a cancelar el viaje que tenía previsto hacer con su colega venezolano, Hugo Chávez, a la localidad de Tarija para la firma de acuerdos energéticos.

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(EFE)

En una breve comparecencia ante la prensa, Fernández explicó que decidió cancelar la visita a pedido del canciller boliviano, David Coquehuanca, para evitar "episodios de violencia o que fuera objetivo de situaciones provocadas".

En una breve comparecencia ante la prensa, Fernández explicó que decidió cancelar la visita a pedido del canciller boliviano, David Coquehuanca, para evitar "episodios de violencia o que fuera objetivo de situaciones provocadas".

La presidenta manifestó su "preocupación" por la situación que se vive en Bolivia y confió en la pronta "normalización" del país.

El domingo los bolivianos se pronunciarán en un referéndum acerca de si deben permanecer en sus cargos el mandatario boliviano, Evo Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera y ocho prefectos (gobernadores).

Hoy, en medio de un aumento de la conflictividad, una multitud se personó en el aeropuerto de Tarija en rechazo a la anunciada presencia de Morales y trató de invadir la pista, pero fue dispersada por la policía con gases lacrimógenos.

Tarija es uno de los departamentos controlados por la oposición e implicados en un proceso autonomista.

"Voy a comunicarme con Evo Morales" para tener "mayor conocimiento de la situación", agregó Fernández, quien expresó su "apoyo más enfático al respeto de las instituciones democráticas y de la institucionalidad en la hermana República de Bolivia".

"Confío profundamente en que funcionen las instituciones y que todos respeten la Constitución", afirmó.

"Debemos estar comprometidos con las instituciones democráticas", insistió, tras recordar que Morales fue elegido democráticamente y se somete a la voluntad popular en un referendo.

La mandataria dijo que siempre hubo un compromiso del Mercosur en "preservar la integridad territorial de los países de América del Sur" y que el apoyo a Bolivia "se da por la voluntad y expresión clara que los presidentes (del bloque) han tenido en este sentido".

Destacó la presencia de observadores internacionales que todos los países de la región han enviado a Bolivia "para garantizar la transparencia del referendo".

"Nosotros y el Mercosur los hemos enviado para garantizar la institucionalidad del proceso", indicó.

Por otro lado, consideró que "sin lugar a dudas, si se afecten las instituciones democráticas, no solo en Bolivia, se afecta a la estabilidad de la región".

La presidenta explicó que tenía previsto firmar hoy en Tarija un acuerdo de entendimiento sobre una planta separadora de gases y apuntó que "seguramente habrá oportunidad de poder viajar nuevamente" para suscribir un convenio "muy importante para Bolivia, Argentina y para la ecuación energética en toda la región".

La provisión de gas desde Bolivia "no peligra de ninguna manera porque hay contratos firmados y porque creo que va a haber estabilidad y se van a preservar las instituciones en Bolivia", agregó.

La presidenta, que hoy hizo su segunda comparecencia ante la prensa desde que empezó su mandato en diciembre pasado, únicamente respondió dos preguntas relacionadas con la situación en Bolivia.