La mujer tetuda

Cuando creía haberlo visto todo en televisión, llegó Busty Heart y rompió unas sandías con los melones. La vieja competencia veraniega entre dos sabrosas cucurbitáceas, dirimida de manera fratricida, en directo, en televisión. En Antena 3. Ante cientos de miles de espectadores. La sandía es una jugosa herbácea que, precisamente ahora, alcanza su madurez: yo les recomiendo las de los llanos de Velada, un pueblo que está muy cerca de mi casa. Los melones de Busty no tienen nada que ver con el fruto de la planta de tallo rastrero, puesto que en realidad se trata de unos trozos enormes de silicona implantados de manera irresponsable en el cuerpo de una veterana bailarina de striptease. En '¿Dónde estás corazón?' las sandías estallaron ante la contundencia de los golpes de pecho, en uno de los espectáculos más sórdidos, violentos y denigrantes que recuerdo. El mal gusto convertido en televisión.

Busty Heart, en el paseo de la estrellas

¿Recuerdan 'Freaks', la parada de los monstruos? Pues cambien a la mujer barbuda por la mujer tetuda y ya tienen la versión televisiva de la vieja película de Tod Browning. Busty en realidad se llama Susan, y es una norteamericana de 47 años que en los últimos catorce se ha operado nueve veces los pechos para aumentar su tamaño. Ahora tiene unas tetas enormes, descomunales, esperpénticas. Es una mujer a unas ubres pegada. En '¿Dónde estás corazón?', uno de los excrementos más apestosos expelidos por ese recto con aspecto de cadena de televisión que es Antena 3, contrataron sus servicios como monstruo de feria.

"Tiene dos enormes virtudes", aseguraba un ingenioso Jaime Cantizano. El presentador, cómplice en la humillación televisiva, sopesó los desmesurados pechos con sus propias manos y realizó algunas preguntas estúpidas, sin perder ni por un segundo la sonrisa ovina. Lo tenía todo preparado: unos azulejos, unas latas de refrescos y tres sandías. Busty, el monstruo, pudo con todo. Destrozó los azulejos, espachujó las latas y rompió las sandías. ¡Qué gran espectáculo!

Mauricio Carlotti, vicepresidente de Antena 3, y Silvio González, consejero delegado, estarán orgullosos. Y los accionistas de la cadena privada imagino que también. Tienen motivos. Su modelo de televisión es impecable, ganador, incuestionable. Piensen que la sola presencia de Busty, la mujer tetuda, justifica plenamente la creación, hace tres años, de la Fundación Antena 3, "un punto de encuentro entre infancia, primera juventud y familia". Una fundación que, según la web de la cadena, "pretende formar y concienciar mediante actividades lúdicas… Promover los valores y principios éticos que contribuyan a la protección de niños y jóvenes y a su formación como ciudadanos… y contribuir en la mejora y enriquecimiento de la relación entre los menores y el medio televisivo".

Seguro que Busty Heart aceptaría orgullosa el puesto de madrina de la Fundación Antena 3. Y sin duda accedería de buen grado a triturar media docena de sandías, de manera gratuita y ante las cámaras de la cadena, cada día de navidad, con el fin de promover los valores y principios éticos de infancia, primera juventud y familia. Y contribuir de esa manera, a tetazo limpio, a la protección de niños y jóvenes y ayudar a su formación como ciudadanos.

Me gustaría recordar, una vez más, que las cadenas de televisión no son propiedad de las empresas que las explotan. Son concesiones del Estado, que debería tener la obligación de velar por la calidad de los contenidos que se emiten. Ver en una televisión española a una mujer deforme, rompiendo sandías con los pechos, no sé si resulta coherente con la supuesta política del Gobierno, basada en presumir de paridad, respeto y tantas y tantas cosas para con las mujeres.

Un motivo para no ver la televisión

Sonny Landreth.
Cd: From The Reach.
Proper / Dock.

Éste es un disco para guitarristas. La razón es muy sencilla: Landreth es un guitarrista enorme que, desde la penúltima fila, lleva años trabajando los sonidos menos comerciales, más difíciles, más puros, más auténticos. El de Caton (Mississippi) es un tipo discreto que toca como los ángeles y ha participado como músico de sesión en centenares de grabaciones. Éste es su octavo disco.

'From The Reach' tiene algo diferente, que aleja este trabajo del resto de obras maestras de Landreth: incluye los elementos necesarios para hacer de nuestro hombre una estrella. Los "elementos" son Mark Knopfler, Eric Clapton, Robben Ford, Jimmy Buffet, Dr. John, Eric Johnson…Guitarristas de lujo que colaboran en buena parte de los once temas de este disco brillante, denso, repleto de matices y de acordes inagotables. Una lección de blues y de guitarra.