Canadá celebra los 400 años de la fundación de Québec con disputas

Toronto (Canadá).-  Con el desfile de actores ataviados como los colonizadores y las tropas francesas que en 1608 fundaron Québec, Canadá celebró hoy el 400 aniversario de la ciudad más antigua al norte de México en medio de disputas.

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(EFE)

Una bandera de Quebec es ondeada. Canadá celebró este jueves el 400 aniversario de Quebec, la ciudad más antigua al norte de México en medio de disputas.

La fidelidad con la que los canadienses intentaron reproducir el ambiente de lo ocurrido hace cuatro siglos fue extrema.

Hasta la persistente lluvia, que obligó a que todas las personalidades que asistieron a la ceremonia tuviesen que utilizar paraguas, fue una reproducción fiel de lo que el fundador de la ciudad, el explorador Samuel de Champlain, se encontró el 3 de julio de 1608.

Sin embargo, el agua no consiguió deslucir la celebración.

"No son las mejores condiciones climatológicas, pero tenemos ganas de una fiesta", dijo la gobernadora general del país, Michaëlle Jean, que ejerce las funciones de jefa de Estado en representación de la reina Isabel II de Inglaterra.

Pero siendo Québec y dado el ambiente político que se vive en estos momentos en el país, en permanente campaña ante la posibilidad de que en cualquier momento se celebren elecciones anticipadas, hasta el estado del tiempo en el 400 aniversario ha sido fuente de disputa.

Cuando el miércoles se le habló a un cercano asesor del líder de la oposición, el liberal Stephane Dion, sobre las previsiones meteorológicas de hoy, el político echó la culpa a Ottawa.

"El tiempo es una responsabilidad federal", afirmó en referencia a que el Gobierno del país tiene las competencias sobre la predicción de las condiciones meteorológicas.

Bromas aparte, la celebración de la fundación de la ciudad de Québec -"la más bella de Canadá", según dijo hoy el primer ministro del país, el conservador Stephen Harper- ha demostrado las profundas diferencias que dominan la nación norteamericana.

El Partido Quebequés (PQ), que agrupa al movimiento soberanista de la provincia francófona, ha decidido tener una discreta presencia en las celebraciones, a diferencia de la importancia que dio a la Fiesta Nacional quebequesa del pasado 24 de junio.

Para los independentistas, la fundación de la ciudad marca el nacimiento de la nación quebequesa, mientras que para los federalistas, la llegada de De Champlain en realidad es el inicio de la historia de Canadá.

Soberanistas y federalistas no son los únicos que se disputan el significado del 400 aniversario.

Algunos grupos indígenas ha mostrado su descontento con que tanto unos como otros dejen de lado el hecho de que la llegada de los primeros colonos europeos supuso el inicio de siglos de penurias y dominación para ellos.

Fuera de Québec, la generosa contribución del Gobierno federal a las celebraciones, estimada en 120 millones de dólares, ha causado malestar por ser muy superior a las aportaciones de Ottawa a otros actos sociales.

Al fin y al cabo, el Gobierno de Harper se ha esforzado en cortejar a los votantes de la provincia que, en dos ocasiones (en 1980 y en 1995), ha celebrado referendos independentistas y donde el apoyo electoral al PQ se mantiene año tras año entre el 30 y el 40 por ciento.

De la provincia salen 75 de los 308 diputados del parlamento federal y cualquier partido que quiere gobernar con mayoría necesita buenos resultados en Québec.

Harper, que gobierna en minoría desde el 2006, ha llenado su gabinete con ministros quebequeses.