Presentan cargos contra un saudí por un atentado contra un navío de guerra estadounidense

Washington.-  El Pentágono presentó hoy cargos contra el saudí Abd al-Rahim al-Nashiri por "organizar y dirigir" en el año 2000 un atentado contra el destructor estadounidense "USS Cole", en el que murieron 17 marineros, y otros actos terroristas.

La fiscalía ha pedido la pena de muerte para al-Nashiri, que será juzgado en los tribunales antiterroristas especiales creados en la Base Naval de Guantánamo si su autoridad máxima, Susan Crawford, acepta los cargos.

Estados Unidos le acusa de tener un papel clave en el atentado contra el "USS Cole", que fue atacado por un bote dirigido por terroristas suicidas el 12 de octubre de 2000 cuando estaba atracado en el puerto de Adén, en Yemen.

Además de las 17 muertes, el atentado causó heridas a 47 personas, según el Pentágono.

Al-Nashiri, cuya familia es de origen yemení, afirmó en marzo de 2007 durante una audiencia ante una junta militar en Guantánamo que había confesado su participación en el atentado para detener las torturas a la que presuntamente era sometido.

"Simplemente dije esas cosas para tenerlos contentos", dijo ante la junta, según una transcripción parcial hecha pública por el Pentágono.

En febrero, el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Michael Hayden, reconoció que Al-Nashiri fue uno de tres detenidos a los que sus agentes sometieron a "asfixia simulada", un método que la mayoría de los expertos en derecho internacional considera tortura.

Al contrario que el sistema judicial estadounidense, los tribunales de Guantánamo, que dependen del Pentágono, permiten el uso de pruebas obtenidas durante interrogatorios en los que se usan técnicas extremas.

El general Thomas Hartmann, asesor de esos tribunales, dijo en una rueda de prensa en el Pentágono que el juez deberá determinar si acepta o no la confesión.

Hartmann explicó que cinco de los ocho cargos contra Al-Nashiri pueden llevar a una condena a pena de muerte: asesinato, traición, violación de las leyes de guerra, terrorismo y destrucción de propiedad.

Según la acusación, el saudí alquiló viviendas cerca de Adén para observar el puerto y compró el barco pequeño y los explosivos que se usaron en el atentado.

En enero de 2000 sus operativos intentaron detonar su carga letal contra el buque "USS The Sullivans", pero sin éxito. Unos meses después Al-Nashiri se reunió con Osama bin Laden, el líder de Al Qaeda, para reorganizar el plan, de acuerdo con Estados Unidos.

Tras probar de nuevo los explosivos que fallaron en el primer intento, Al-Nashiri puso en marcha el atentado contra el "USS Cole", que tuvo lugar en octubre de 2000.

En 2002 también participó presuntamente en una acción terrorista contra el barco cisterna francés "SS Limburg" en el Golfo de Adén, en la que murió un marinero y se derramaron unos 90.000 barriles de petróleo.

Al-Nashiri fue capturado ese mismo año y la CIA lo mantuvo en cárceles secretas durante cuatro años.