El Gobierno catalán dice que la directiva de inmigración "nos avergüenza como europeos"

Santiago de Chile.-  La directiva de retorno de inmigrantes ilegales aprobada la semana pasada por el Parlamento Europeo "nos avergüenza como europeos", declaró a Efe el consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña, Joan Saura.

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(EFE)

El consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña, Joan Saura.

"Es completamente normal y entiendo el rechazo que esta directiva ha levantado en los países de América Latina, porque yo también la rechazo por cuestiones simplemente sociales y humanitarias", dijo el responsable de Interior, Relaciones Institucionales y Participación del gobierno regional de Cataluña, en el nordeste de España.

Saura inició el pasado martes una visita oficial a Chile de tres días durante la cual se ha entrevistado con el la presidenta Michelle Bachelet y ha firmado acuerdos sobre recuperación de la memoria histórica de hechos violentos del pasado, como la Guerra Civil española y la dictadura del general Augusto Pinochet.

Además, Saura -miembro de una coalición de izquierda y ecologista- participará hoy en el homenaje con motivo del centenario del nacimiento de Salvador Allende, el presidente socialista chileno muerto en el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.

El consejero de Interior catalán se refirió a la directiva comunitaria sobre migración como "un gran error desde el punto de vista social".

"Lo que esta directiva significa es que en estos momentos, (el presidente francés, Nicolás) Sarkozy y (el primer ministro italiano, Silvio) Berlusconi están mandando en Europa y la están conduciendo hacia posiciones no ya conservadoras, sino reaccionarias".

Saura elogió el voto en contra de los eurodiputados Josep Borrell, Raimon Obiols y Marc Grau, miembros del Partido Socialista de Cataluña (socio suyo en el gobierno regional).

Pero agregó que echa en falta una postura de rechazo de la izquierda europea a leyes regresivas como la referida a la migración y la que permite extender la jornada laboral a 65 horas semanales.

"Es importante que la izquierda europea, la izquierda española, el propio presidente (José Luis Rodríguez) Zapatero cambien de posición en relación a estos temas", agregó.

Sobre su visita, el consejero Joan Saura destacó que "la relación entre Cataluña y Chile viene de muy lejos, con momentos trágicos en los que cada país ha acogido a personas del otro país".

"Después de la Guerra Civil en Cataluña, México y Chile fueron los dos países que acogieron exiliados, y después del golpe de Estado de Pinochet, muchos chilenos fueron a Cataluña; por lo tanto, hay unos lazos de afecto".

Saura destacó la "voluntad política y social de ambos gobiernos de recuperación de la memoria histórica, sin ningún afán de revancha, sino para cicatrizar heridas".

El miércoles, Saura participó en la ciudad de Valparaíso, a 120 kilómetros al oeste de Santiago, en un homenaje a los 2.050 exiliados de la Guerra Civil española que llegaron a Chile en el carguero "Winnipeg", fletado por el poeta Pablo Neruda cuando era cónsul en París.

En ese acto -al que asistieron el ministro chileno de la Presidencia, José Antonio Viera Gallo, y el alcalde de Valparaíso, Aldo Cornejo- el consejero anunció que Cataluña dedicará el año 2009 a recuperar la memoria del exilio y pondrá la historia del "Winnipeg" como un símbolo de la acogida a los refugiados políticos.

En esta iniciativa, la Generalitat de Cataluña espera contar con el apoyo de los gobiernos de Chile, Argentina y Uruguay, países que sufrieron cruentas dictaduras en los años setenta y ochenta.

El responsable de Relaciones Institucionales de la Generalitat fue recibido ayer -junto con la directora de la Sociedad Estatal para la Acción Cultural Exterior de España, María Isabel Serrano- por la presidenta chilena, Michelle Bachelet, quien agradeció a ambas instituciones la labor desarrollada para la recuperación del legado de Salvador Allende.

Al respecto, Saura destacó que "el triunfo de Salvador Allende (en 1970) abrió el horizonte" a los partidos de izquierda en Europa y "permitió impulsar la democracia como un elemento estructural".