Piden que la seguridad medioambiental sea reconocida como un derecho humano

Ginebra.-  El presidente de las islas Maldivas, Maumoon Abdul Gayoom, propuso hoy en la primera sesión del Foro Global Humanitario que la comunidad internacional reconozca "la seguridad medioambiental como un derecho humano".

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(EFE)

El ex secretario general de la ONU y presidente fundador del Foro Global Humanitario, Kofi Annan (izq.), hoy en Ginebra acompañado de su esposa, Nane Lagergren, y del presidente de las islas Maldivas, Abdul Gayoom.

Asimismo, el secretario ejecutivo de la Convencion de la ONU para el Cambio Climático, Yvo de Boer, tras denunciar como "criminal" la falta de liderazgo ante el cambio climático, aseguró que el mundo deberá invertir 20 billones de dólares en los próximos 25 años para abastecerse de la energía necesaria para mantener el actual crecimiento económico.

Advirtió que esa cantidad, "de no ser invertida sabiamente podría contribuir a un aumento del 50 por ciento de los gases causantes del efecto invernadero".

Gayoom, que fue una de las voces que en nombre de los millones de afectados por el cambio climático pudieron escucharse hoy, explicó cómo esta situación incidía sobre los pequeños territorios insulares, donde el aumento del nivel del mar ha dejado de ser una amenaza para convertirse en una realidad.

"Por qué el mundo no toma medidas para corregir esta situación", se preguntó Abdul Gayoom.

"Estamos pagando el hecho de que, hasta ahora, sólo se haya prestado atención a los datos científicos del cambio climático, sin pensar en lo que eso significa para la gente común, que pierde sus hogares, sus cultivos y sus tierras", recalcó el mandatario.

En esta jornada, jóvenes llegados de los más variados países en desarrollo -Islas Mashall, Togo, India y Brasil- ofrecieron emotivos relatos sobre cómo sus comunidades están sufriendo las consecuencias de la dramática transformación de los patrones climáticos.

"En mi isla estamos observando la desaparición de playas, de vegetación y de tierras por la subida del nivel del mar", dijo James Bing, llegado desde el archipiélago de Islas Marshall.

A su vez, Guilerme Pastore contó que la sequía se ensaña con las poblaciones del noreste de Brasil, mientras las inundaciones afectan a las del sur, todo ello mientras se agrava la deforestación de la Amazonía.

Con esta misma preocupación, el enviado especial de la ONU para el cambio climático y ex presidente de Chile, Ricardo Lagos, recalcó la importancia de movilizar al sector privado para obtener los inmensos recursos necesarios para revertir esta tendencia.

Según Lagos para conseguir esos recursos privados los países en desarrollo deben contar con regulaciones e instituciones fuertes e insistió en que la lógica con la que se aborda este problema debe cambiar.

"Por qué en lugar de pagar por plantar un árbol no es más razonable pagar por no cortarlo", preguntó Lagos a la audiencia.

Por su parte, De Boer insistió en que es preciso que el mundo enfrente con una posición común el desafío que supone la rápida degradación del medio ambiente.

Los dirigentes políticos -añadió- deben asumir su responsabilidad por las promesas que hacen en las reuniones internacionales y que luego incumplen.

Asimismo, en su discurso de inauguración, Annan reclamó que no se haga pagar a los países pobres "las acciones y errores de otros" y que, en consecuencia, las naciones industrializadas les ayuden a crecer sin dañar el medio ambiente.

El Foro Global Humanitario, una nueva entidad fundada por el ex secretario de Naciones Unidas, Kofi Annan, dedica ésta su primera reunión anual a analizar el impacto del cambio climático en la humanidad.

Para ello ha convocado durante dos días en Ginebra, donde ha establecido su sede, a representantes de gobiernos, organizaciones internacionales y del sector privado.