Todos los medios de comunicación nos llenamos la boca con datos macroeconómicos sobre la "desaceleración acelerada" de la economía, como le gusta presentarla a Zapatero. Pero el IPC no te viene en las facturas, nunca te has planteado comprarte un barril de Brent cotice al precio que cotice y 'superávit presupuestario' son palabras que ni siquiera puntúan doble en el 'Scrabble'. La crisis tiene que ser algo mucho más tangible que todo esto si va a arruinar nuestras cuentas corrientes. A estas alturas son muy pocos los que todavía se resisten a admitir que estamos en medio de una crisis económica. Eufemismos aparte, hay quien lo nota al comprar los macarrones, otros al echar la gasolina y los más al pagar su hipoteca. ¿Se puede decir entonces que la crisis está ya a la altura del pueblo llano? ¿Ha llegado ya la crisis a tu barrio?