Hipólita y Matea, las esclavas negras que cuidaron del prócer independentista Simón Bolívar en su niñez, y cuyos restos reposan en un sepulcro en la Catedral de Caracas, están camino del Panteón Nacional, donde descansan los héroes venezolanos.La iniciativa de trasladar los restos de las dos mujeres, conocidas como "las negras Hipólita y Matea", fue presentada por la vicecancillería venezolana para África y se encuentra actualmente en estudio.