El plan para la primera muestra internacional sobre Machu Picchu está paralizado, dice Yale

New Haven (EEUU).-  Los planes para la primera exposición internacional itinerante sobre Machu Picchu están "paralizados" -según la Universidad de Yale- porque Perú ha exigido el retorno de todas las piezas que la institución atesora.

ampliar foto

(EFE)

Piezas arqueológicas encontradas en la ciudadela Inca de Machu Picchu, que actualmente se encuentran en custodia en la Universidad de Yale, en New Haven (EEUU).

La demanda del Gobierno de Perú supone un cambio radical respecto a los parámetros de un "memorando de entendimiento" firmado entre ambas partes en septiembre.

Ese principio de acuerdo preveía que Yale se quedara con gran parte de los objetos de la colección "de investigación" por 99 años y con algunas piezas de calidad de forma "permanente", según la interpretación del texto por parte de la Universidad.

El Gobierno de Alan García modificó su posición debido a las presiones de la opinión pública peruana, según confirmó a Efe una fuente gubernamental que no quiso ser identificada.

La nueva postura ha sorprendido a la Universidad y ha dejado en el aire el entendimiento alcanzado por las partes.

"Hemos alcanzado un acuerdo muy bueno con el memorando de entendimiento y esperamos continuar las negociaciones dentro del marco del memorando", dijo Helaine Klasky, vice-rectora adjunta de la Universidad.

Los representantes de Yale hicieron estos comentarios durante la visita de un pequeño grupo de periodistas, la mayoría de Lima, invitados por la Universidad para presentarles su versión.

Yale sopesa cómo responder a la demanda peruana, según Barbara Shailor, responsable de todos los museos de la Universidad, con sede en la pequeña ciudad de New Haven (Connecticut).

No hay, por ahora, sesiones de negociación programadas entre las partes, de acuerdo con Klasky.

Por su parte, Vladimir Kocerha, portavoz de la Embajada de Perú, señaló que Yale y el Gobierno de Perú "continúan las conversaciones conforme al espíritu del memorando de entendimiento, el cual reconoce la propiedad peruana del 100 por cien de las piezas".

Señaló, además, que se "desea concretar" los planes de colaboración entre Perú y la Universidad de Yale.

Esa cooperación pasaba por la organización de la primera muestra internacional de los objetos más llamativos que trajo a Yale en 1912 Hiram Birgam, el primer extranjero en pisar la ciudadela más emblemática del mundo inca.

Perú prestaría otros 40 objetos para la exposición, según el memorando.

Museos en Canadá, Alemania y Francia, además de Estados Unidos, han expresado interés por acogerla. Sin embargo, "los planes para la exposición están paralizados y temo que podamos perder la oportunidad", dijo Shailor.

El memorando preveía que la exposición itinerante viajara durante dos años por todo el mundo, al cabo de lo cual los objetos serían albergados en un nuevo museo que Perú construiría en Cuzco.

Yale cargaría con el costo de organizar la muestra, mientras que los beneficios por las entradas y las ventas de recuerdos serían donados al nuevo museo, según el principio de acuerdo.

Se trataría de la primera exposición internacional con objetos de Machu Picchu, aunque en el 2003 Yale ya organizó una por Estados Unidos con las piezas en su haber y la vieron 1,2 millones de personas, según Lucy Salazar, la arqueóloga peruana que la organizó.

Otro punto de conflicto entre Yale y el Gobierno de Perú es el futuro hogar de las piezas. El memorando especifica que si al término de la exposición itinerante el nuevo museo no está listo, la colección volverá al Museo Peabody de Yale.

Perú ha propuesto a la Universidad albergar temporalmente los hallazgos en el convento de los Betlemitas, en Cuzco.

La institución estudia actualmente esa idea, según Tom Conroy, un portavoz, quien recalcó, sin embargo, que a este respecto Yale "aún cree que el memorando que firmamos supone la mejor solución".

Ese texto prevé que Yale envíe a Cuzco de la mayoría de las 369 piezas de suficiente calidad para ser exhibidas, que incluyen cerámicas intactas, objetos de piedra y algunas joyas de metal.

La Universidad también devolvería una parte de la colección "de investigación", compuesta por fragmentos de cerámica, hueso y piedra, y muestras de fauna.

En marzo un equipo peruano se desplazó a New Haven para realizar un inventario de las piezas y determinó que hay 46.332 objetos.