'Y todo va bien' gracias a YouTube

Las más de 60 millones de visitas que su primer corto, ‘Lo que tú quieras oír’, recibió en YouTube, Guillermo Zapata, hoy guionista de la serie ‘Hospital Central’, le hicieron conseguir productora para su segunda obra en formato corto, 'Y todo va bien', que se estrena hoy en Madrid y en internet. Zapata consiguió la financiación gracias a la red y precisamente de cibernautas va su nueva obra.

Marta y Nacho por las noches se llaman Cafe85 y Beneficio y se convierten en internautas que chatean. Mantienen relaciones sexuales cibernéticas, lo que les mantiene vivos pese a que sus vidas son un auténtico descalabro. "La realidad es que nada les va bien", dice Guillermo Zapata, "lo que ocurre es que cada mañana se dicen a sí mismos: ‘Todo va bien’".

A quien sí parece que le van bien las cosas es al director. Tras el éxito internetero de ‘Lo que tú quieras oír’, que se vio en la red pero sólo llegó a proyectarse en una sala cinematográfica en un festival de Badalona, esta noche ‘Y todo va bien’ se estrenará en el cine Capitol de la Gran Vía madrileña. Todo lleva una evolución, de las pequeñísimas pantallas de los vídeos de YouTube a las grandes de la Gran Vía. Será dentro de las habituales proyecciones de cortos que regularmente se producen dentro del festival Cortogenia, junto a otras obras como, por ejemplo, ‘Alumbramiento’de Eduardo Chapero Jackson, premiado en Venecia y Cannes. Además, se proyectarán ‘Porque hay cosas que nunca se olvidan’, de Lucas Figueroa, y ‘Epílogo’, del actor y cortometrajista Zoe Berriatúa.

Fidelidad a la política 'youtubera'

‘Y todo va bien’ es, según cuenta su director, "una escisión de un largometraje coral que estaba escribiendo con historias relacionadas con la comunicación". Ésta era la trama que más le gustaba a Guillermo Zapata y por eso decidió convertirla en protagonista de una obra. Una historia que sedujo a Prosopopeya Producciones, así como el espíritu que había movido al guionista a distribuir su primer corto por internet gracias a la licencia Creative Commons, que permite hacer tantas copias de una obra como se desee, así como las modificaciones que sean necesarias, para goce y disfrute de todos los internautas.

Por primera vez una productora está más interesada en que una obra se vea, aunque sea gratis, que en conseguir beneficios económicos de ella, y eso que el cortometraje no tiene subvención alguna. "Ellos comprenden que cuanto más se vea el corto, mucho mejor".

"Lo más divertido", según Zapata, "fue tener que escribirme dos páginas, ya en el proceso de postproducción, sobre conversaciones de chat subiditas de tono. Porno, para qué nos vamos a engañar". Y lo más agobiante fue que hasta tres días antes del rodaje, que se realizó durante cinco jornadas en el puente del 12 de octubre de 2007, no tenían ayudante de dirección. Para quien no lo sepa, el ayudante es la pieza fundamental en un rodaje, mucho más, si cabe, que el propio director.

El director es fiel a su política ‘youtubera’ y hace 20 días, colgó en internet dos trailers como aperitivo a lo que vendrá a partir de hoy. En sólo tres semanas y, teniendo en cuenta que se trata sólo de trailers, uno de ellos ha llegado a las 4.000 visitas y el segundo, a las 1.900. Lo que es saber moverse.

Guillermo Zapata y sus dos obras son ejemplos de la democratización que internet ha hecho llegar al cine. Una buena idea, un equipo trabajador, una cámara de vídeo, un programa de edición y facilidad para moverse en la red, y cualquiera puede llegar a cumplir sus sueños cinematográficos. ¿Te animas?