La antorcha olímpica comienza su polémico camino rumbo a Pekín

OLIMPIA/PEKIN.-  Los organizadores chinos describieron el recorrido de la antorcha olímpica rumbo a Pekín, que comienza mañana en Olimpia, como el "viaje de la armonía", pero todo hace indicar que el viaje será polémico y estará acompañado por las protestas contra el gobierno chino.

Simela Pantzartzi (EFE)

La antigua Olimpia ha acogido a las sacerdotisas durante el ensayo de encendido de la llama olímpica, frente al Templo Hera.

Tras los graves desórdenes recientes en el TÍbet, los tibetanos en el exilio planean numerosas protestas en el largo periplo del fuego olímpico, que recorrerá 137.000 kilómetros alrededor del globo a partir de mañana, cuando se encienda el fuego en la mítica localidad griega de Olimpia.

Ya en Grecia mañana habrá elevadas medidas de seguridad. El gobierno de Atenas alertó de posibles intentos por interrumpir la ceremonia del encendido del fuego que presidirá los Juegos de Pekín en agosto.

"Estamos dispuestos a proteger el fuego olímpico con todos los medios a nuestra disposición", se dijo desde el gobierno griego. El temor se centra en que tibetanos en el exilio y simpatizantes de la causa del Tíbet puedan protestar contra lo que consideran una política de represión de China en la región.

Uno de los momentos más esperados será cuando el fuego olímpico luzca por primera vez en el monte Everest, el pico más alto del mundo de 8.850 metros, algo que irrita a los tibetanos, porque ello confirma el dominio extranjero chino sobre la tierra montañosa más alta del planeta.

Un conflicto similar se vivirá en Taiwan, considerada por China como una provincia secesionista. Allí no llegará la antorcha, pues los demócratas taiwaneses no querían renunciar a enarbolar su bandera ni a intepretar su himno nacional, lo cual habría constituido una afrenta para los líderes comunistas de China.

"Enciende la pasión, comparte el sueño". Ése el eslogan chino para los relevos de la antorcha.

El controvertido viaje comienza mañana en la antigua Olimpia, donde se encenderá el fuego con la ayuda de un espejo cóncavo.

"¡Apolo, dios del sol! Envía tus rayos y calienta nuestros corazones", exclamará mañana la "suma sacerdotisa", encarnada por la artista griega Maria Nafpliotou. La apelación, en vista de los debates sobre el recorrido de la antorcha e incluso sobre un boicot a los Juegos Olímpicos, parece más bien un desesperado llamamiento a la reconciliación.

Tras el recorrido por Grecia, el fuego será entregado el 30 de marzo a los organizadores griegos en el estadio Panathinaikos de Atenas, que fue escenario en 1896 de los primeros Juegos Olímpicos de la Era Moderna. Para la ceremonia acudirá a la capital griega el jefe del Partido Comunista de Pekín, Liu Qi. El poderoso miembro del politburó es a la vez presidente del comité organizador de los Juegos de Pekín 2008 (BOCOG).

Con 21.000 relevistas y una marcha de 97.000 kilómetros alrededor del mundo-40.000 en el interior de China-, el recorrido de la antorcha batirá todos los récords. Pero sólo en un tres por ciento del camino la llama será portada en realidad por corredores. El resto, volará alrededor del mundo a bordo de un Airbus de la compañía aérea Air China.

En el más largo recorrido de la antorcha en la historia olímpica participarán 2.000 corredores en 21 ciudades fuera de China. Diariamente, 80 relevistas portarán la llama 250 metros cada uno.

En la populosa China participarán 19.000 corredores. Cada día, 208 participantes portarán el fuego 200 metros. Los relevistas son deportistas escogidos, representantes de todos los grupos étnicos, obreros ejemplares, empresarios, científicos y otras personalidades, e incluso 250 extranjeros que trabajan en China.

El punto culminante del itinerario de los relevos es la ascensión al Everest. Por temor a las protestas de los activistas tibetanos en el exilio se prohibieron las escaladas por la parte tibetana. Para el viaje a la montaña más alta del mundo, el fuego se dividirá a su llegada a Pekín el 31 de marzo. Mientras una llama será transportada por 31 provincias, la otra volará al Tíbet.

Los montañeros llevarán a la cumbre el fuego en un día de mayo con buen tiempo y en una antorcha especial, protegida contra el viento, mientras el mundo sigue por televisión en directo la escalada. Tras el ascenso, el fuego se unirá de nuevo con la otra llama, cuya llegada a la capital tibetana, Lhasa, está prevista para el 20 de junio.

El comité organizador no ve en peligro el recorrido por la agitada región tibetana. "Las autoridades en el Tíbet asegurarán que los relevos de la antorcha discurran sin problemas", dijo el subjefe del BOCOG, Jiang Xiaoyu, que condenó las manifestaciones planeadas a lo largo del recorrido en muchas ciudades del mundo. "Son una amenaza al movimiento olímpico", señaló.

"El pueblo chino está entusiasmado, quiere organizar en Pekín unos Juegos que pasen a los anales de la historia olímpica", agregó.

Grupos de tibetanos en el exilio recordaron a China que el deporte, según la Carta Olímpica, "debe servir al desarrollo armonioso de la humanidad y promover una sociedad en paz".

"Con motivo de la actual crisis en el Tíbet, el recorrido de la antorcha hará que la tensión sea aún más peligrosa o hará al COI cómplice de la represión por permitir a China una exitosa acción de propaganda", dijo la red internacional de apoyo a Tíbet, que exigió que la antorcha de la discordia no pase por territorio tibetano para evitar conflictos.