El 'low cost' se ha convertido en la filosofía imperante que poco a poco va aplicándose a todos los servicios del sector turismo. El caso paradigmático es, sin lugar a dudas, los vuelos. El pasado mes de agosto, época del año en que más visitantes llegan a nuestro país, el 40 por ciento de ellos lo hicieron en alguna aerolínea de bajo coste. El grado de ocupación de estas compañías superó al de las tradicionales. En el caso de los hoteles también han nacido iniciativas con esta vocación, tales como easyHotel o Bonhocio. Pero, ¿para cuándo llegará el 'low cost' a los autobuses en España?
En Inglaterra y EEUU ya existen compañías de buses 'low cost'.
El lanzamiento de las nuevas rutas del AVE Barcelona-Madrid, Valencia-Madrid o Málaga-Madrid podrían suponer un buen momento para las compañías de autobuses para lanzar contraofertas.
La propia Renfe ha hecho su intento de crear dos tarifas estrella con reducciones del 40 y el 60% para los billetes del AVE que, anunciadas a bombo y platillo, pasaron de presentarse como la oferta del siglo a algo casi inexistente e imposible de encontrar en la página web, aunque en la actualidad el sistema de reserva ha mejorado.
En el caso de los autobuses, al contrario que en otros países, sólo Alsa ha lanzado ofertas llamativas para los usuarios y tampoco puede decirse que puedan encontrarse sistemáticamente viajes a precios como los de Reino Unido o Estados Unidos.
En la web de Alsa se han puesto a la venta billetes por el módico precio de cinco euros a los viajeros mayores de 60 años que hagan el trayecto Valladolid-Madrid, pocos meses después de la inauguración de esta línea de AVE. La empresa también ha anunciado descuentos de hasta el 75 por ciento en viajes internacionales si se compra con la suficiente antelación y hasta ofreció 30.000 plazas por 10 euros el trayecto. Sin embargo, Alsa no tiene previsto en sus planes establecer ninguna política comercial de 'low cost'. Además, tanto Alsa como Avanza (Auto Res), dos de las mayores compañías de autobuses, gravan las compras de billetes a través de la red.
En varios países ya existen compañías que ofrecen transporte terrestre por precios casi simbólicos, al más puro estilo Ryanair. Por ejemplo, en Reino Unido, Megabus fleta autobuses desde las principales ciudades a partir de una libra. Por ejemplo, un trayecto de cinco horas desde Liverpool a Londres puede salir por alrededor de seis euros. En Estados Unidos existen iniciativas similares, como la de Boltbus, que a partir del próximo 27 de marzo ofrecerá billetes de Nueva York a Washington a partir de un dólar.
El último nicho de negocio contemplado por estas compañías consiste en transportar a los viajeros desde los periféricos aeropuertos empleados por las aerolíneas de bajo coste hasta el centro de las ciudades, un trayecto que en ocasiones cuesta más que el propio precio del vuelo. Y eso que las supuestas ofertas no siempre son tan rentables como en un principio parecen.
Terravision, una compañía italiana de autobuses, cubre a bajo coste el servicio de transporte entre los aeropuertos y el centro urbano de varias grandes ciudades europeas, entre los que se incluyen Stansted y Luton, en Londres.
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Mientras no se abra este mercado a la competencia seguiremos con precios muy altos y muy mal servicio. +
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
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