Quijano dice que "rezo a mi manera, no con el credo oficial"

Valladolid.-  El cabeza de lista del PSOE al Congreso por Valladolid, Jesús Quijano (Saldaña (Palencia), 1951), ha confesado en entrevista con la agencia Efe que "reza a su manera", aunque no con el credo "oficial".

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(EFE)

Los candidatos del PP y el PSOE al Congreso de los Diputados por Valladolid, Miguel Ángel Cortés (i) y Jesús Quijano (d).

Diez años como secretario general del PSCL, dos veces candidato a la Presidencia de la Junta, miembro del Consejo Consultivo, aspirante a rector, este doctor en Derecho que lleva en las filas del PSOE desde 1974 entra por primera vez en política nacional tras pedírselo por teléfono José Luis Rodríguez Zapatero a instancia de Felipe González.

Pregunta.-¿Cómo definiría a un diputado? ¿Vale para algo? ¿Da para vivir?

Respuesta.-Es un representante de los ciudadanos, un mediador y no un conseguidor. Aún no sé -si da para vivir- aunque espero que sí. Yo voy a ir a peor en ese sentido, aunque no me importa nada.

P.-¿Cuál es su vocación frustrada?

R.-Me hubiera encantado la historia del Arte, especializado en el románico.

P.-¿Qué no le gusta de la política?

R.-Cuando hay agresividad por encima de lo que debe ser una relación normal dentro de la política y cuando veo que hay personas que llevan esa agresividad al terreno de lo personal.

P.-¿Por qué cree que la política engancha?

R.-Por que enganchan las convicciones. Para mi generación una experiencia tan única e irrepetible -fin de la dictadura, transición, democracia- nos tendrá enganchados mientras vivamos.

P.-¿Qué piensa de los profesionales de la política?

R.-No pongo en negativo que haya gente que haga de la política su proyecto de vida principal o único. Echo de menos que gente de otros ámbitos y con prestigio en su profesión acceda en mayor número a la política.

P.-¿En qué situación rompería la disciplina de voto?

R.-Por algún motivo muy personal o de conciencia, que me parece difícil ya que uno sabe el programa electoral a cuyo desarrollo contribuirá. Si hay cuestiones que no se pueden asumir lo que hay que hacer es no ser candidato. Dado el caso me plantearía antes dejar el escaño que romper la disciplina.

P.-¿Cuál es la decisión más dura que ha tomado en su vida?

R.-Más que dura, difícil, ésta, la de ahora, la de volver al escenario, al cuadrilátero. Vivía una vida cómoda, relajada y hasta placentera. Con mucho trabajo pero estimulante.

P.-¿Cuándo fue la última vez que lloró?

R.-Cuando tuve que tomar la decisión de llevar a sacrificar a una perra que llevaba catorce años con nosotros y que no podía sostenerse en pie. Pasé un día fatal.

P.-¿A qué teme?

R.-Llegando, como voy, a una edad madurita, a llegar a la vejez en malas condiciones de salud. A no tener la cabeza en su sitió y no poder leer la cola de libros que he dejado para cuando me jubile.

P.-¿Daría un cargo de confianza a un inmigrante?

R.-Sin duda ninguna. Hay inmigrantes valiosísimos, sensatos y con una virtud sobre nosotros: valoran lo que tenemos más que nosotros, lo que les hace ser enormemente positivos por que saben de dónde vienen, lo que dejan allí y lo que hay aquí.

P.-¿Tiene hipoteca que pagar? Para sus hijos ¿alquiler o compra?.

R.- No. La vivienda en la que vivo la adquirí en 1989 y era a diez años. A mi hija, en la medida en que puedo, le ayudo a pagar la suya. A mi hijo aún no se le ha planteado el problema.

P.- Sus hijos ¿a la escuela pública, a la privada o a la concertada?

R.- Los dos fueron a un concertado en Educación General Básica. Uno de ellos siguió en el instituto y estudiaron en la UVA, aunque su hija prosiguió estudios en la USAL.

P.- ¿Reza?

R.- A mi manera. No con el rezo oficial digamos. Tampoco sé si a Dios o a quien.

P.- ¿Si tuviera un hijo homosexual?

R.- Lo aceptaría bien. Me tengo por persona abierta y respetuosa. No me plantearía ningún problema.

P.- ¿Le afecta el cambio climático?, ¿Qué hace para frenarlo?