Zapatero pide a los vascos que le voten para "acabar con ETA" y que no den "ni un respiro" a los violentos

VIZCAYA.-  El presidente del Gobierno y candidato socialista a la releección, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió ayer el voto de los ciudadanos vascos para "tener esa fuerza suficiente para acabar con ETA", al tiempo que reclamó a toda la sociedad vasca "que no den ni un respiro a los violentos".

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PSOE (EUROPA PRESS/Carolina Jiménez)

El presidente del Gobierno y candidato socialista a la releección, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió ayer el voto de los ciudadanos vascos para "tener esa fuerza suficiente para acabar con ETA", al tiempo que reclamó a toda la sociedad vasca "que no den ni un respiro a los violentos".

"Pido a los ciudadanos vascos que me den esa mayoría para tener esa fuerza suficiente para acabar con ETA y que gane la libertad para siempre en Euskadi", manifestó Zapatero en un mitin en el Bilbao Exhibition Centre de Barakaldo, ante más de 4.000 personas y con otras tantas que no pudieron entrar en el salón, contemplando el acto por pantallas en otra sala del centro de convenciones, según fuentes del PSOE.

"Pido a toda la sociedad de Euskadi que no dé ningún amparo, ni la más íinima legitimidad, ni un respiro a los violentos, después de que se ha comprobado tras mi esfuerzo que sólo saben hablar el lenguaje del dolor de la muerte y de la bomba. Es lo unico que saben hablar", dijo entre aplausos de los asistentes, sin dar más detalles sobre la política antiterrorista.

Zapatero intervino en el acto después del cabeza de lista del PSE al Congreso por la provincia, Eduardo Madina, y la número dos Arantxa Mendizábal; el secretario general de los socialistas de Vizcaya, José Antonio Pastor, y el de los socialistas vascos, Patxi López.

López arrancó un largo aplauso del auditorio al mencionar, por sus nombres, a varios socialistas vascos víctimas de ETA, al tiempo que rechazaba la acusación del líder del PP, Mariano Rajoy, de que el PSOE y Zapatero han "agredido" a las víctimas de ETA.

También Zapatero se refirió a este momento del debate del lunes: "Algunos compañeros me decían 'por qué no has sido más duro cuando te ha dicho lo de las víctimas'", afirmó mientras el público le jaleaba, y respondió "porque no nos parecemos nada a ellos". "Sentíos orgullosos, no sabéis lo que se disfruta cuando además de ganar se gana con una sonrisa y con buen talante", añadió.

En primera fila asistían al mitin los presidentes de la Generalitat de Catalunya, José Montilla; la Junta de Castilla-La Mancha, José María Barreda; y el Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias. Todos ellos, junto a López, improvisaron un pequeño mitin en la sala anexa donde se encontraban las personas que no pudieron entrar en el salón, informaron fuentes socialistas.

El secretario general socialista se vio también arropado por el público cuando proclamó que "la paz es la tarea más noble, la que más sacrificio exige, es la tarea de los valientes, la tarea de aquellos a los que no les importa perder por salvar vidas, por defender la libertad, comprometerse hasta el fondo como han hecho los socialistas vascos". "Aquí nació el partido, aquí le dais dignidad y aquí se está ganando el futuro", añadió.

QUE CADA CUAL DEFIENDA SU BANDERA

Así, presentó al PSOE como el partido de la tolerancia frente al "ordeno y mando" del PP y pidió el voto "para trabajar por que vivir juntos sea la mejor fórmula, la que más futuro tiene", y "para que todo el mundo en esta tierra se sienta libre y pueda defender su identidad y su bandera y compartirla con otros que defienden otra identidad y otra bandera", afirmando que "esta tierra es de todos y para todos", mientras en la sala ondeaban las banderas del PSE y las 'ikurriñas'.

Además, recordó a los vascos que ha empleado "lo más profundo" de sus "ideales" para "trabajar por ver el fin de la violencia, la paz en esta tierra, y dar un horizonte de dignidad a tantos y tantos ciudadanos que viven amenazados".

De este modo, Zapatero pidió a sus simpatizantes que 'suden la camiseta' de cara al 9 de marzo. "Sé que si somos más fuertes seremos más capaces de acabar definitivamente com la violencia, de hacer que la democracia, que ya ha ganado, evite más dolor, más víctimas, que evite barbarie", precisó.

Tras comenzar su intervención centrándose en el terrorismo, Zapatero pasó a defender los avances sociales de su Gobierno y a criticar al PP, especialmente por su intento de acercarse a los trabajadores y por hablar de los inmigrantes "como si fueran mercancías", mientras "van a misa todos los domingos y se manifiestan con los obispos".

Y para ello, recurrió al recuerdo de la emigración española y del exilio. "¿Es que no tenemos memoria?", se preguntó Zapatero, "¿No hubo en la España fría y dura de la dictadura cientos de miles de españoles qu etuvieron que salir a fuera, a Europa a América y pedíamos que los trataran con dignidad?", dijo.

Así, acusó a los 'populares' de "hipocresía" por decir que defienden a los trabajadores cuando no respaldaron la subida del salario mínimo. "Es pura demagogia, les importa un rábano", afirmó, y opinó que "no sería mala idea" cuando uno de los asistentes propuso en voz alta que el ex presidente de Endesa Manuel Pizarro reparta algo de su indemnización millonaria.