La Comisión de Sequía del Ebro acordó hoy reducir la evacuación de caudales de los embalses, intensificar la vigilancia para evitar las detracciones de agua y los vertidos de las grandes industrias, entre otras medidas, ante la peor situación de los últimos años, aunque no peligra el abastecimiento de las grandes ciudades.En la sede de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), la Comisión aprobó instar al Ministerio de Medio Ambiente que promulgue un decreto de medidas extraordinarias para afrontar esta sequía que afecta prácticamente a toda la cuenca, en la que no hay suficiente agua embalsada para afrontar la cosecha agrícola de verano. 1'04''