La amazonía de Bolivia se declara zona de desastre al margen de la decisión del Gobierno

La Paz.-  La región amazónica de Beni se declaró hoy zona de desastre para gestionar más ayuda y enfrentar las inundaciones que la azotan, tras la decisión del Gobierno de Evo Morales de no hacerlo con el argumento de que aún no era necesario.

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(EFE)

En toda Bolivia, el fenómeno climático de La Niña ha provocado desde el mes de noviembre 51 muertos y 45.000 familias damnificadas.

La Prefectura de Beni y la Alcaldía de Trinidad, capital de la región, informaron la aprobación de resoluciones en ese sentido ante la crecida de las aguas en varias regiones, donde llueve sin parar desde la medianoche del domingo.

El alcalde de Trinidad, Moisés Shiriqui, dijo a Efe que hasta el fin de semana la crecida de las aguas era paulatina y había cerca de 17.000 personas (3.700 familias) viviendo en 29 campamentos, pero las lluvias constantes elevaron la cifra a 25.000 personas, la cuarta parte de todos los habitantes de la ciudad amazónica.

Explicó que tanto el Consejo departamental, como la Prefectura y Alcaldía llegaron a la conclusión de que la situación provocada en la zona por el fenómeno climático "La Niña" es "desesperante".

Según el alcalde Shiriqui, el equipo de ministros que visitó la región se equivocó con sus informes al presidente, que el fin de semana pasado decidió no declarar zona de desastre a la zona porque las aguas aún no rebasaban el dique de protección.

Señaló que la situación se torna cada vez más crítica porque el llamado "anillo de circunvalación" de Trinidad, que es una suerte de dique de protección para el agua de los ríos, comenzó a ser rebasado en algunos sectores y hay barrios inundados.

La cooperación venezolana financió y construyó ocho kilómetros de un segundo dique de contención en la parte sur de la ciudad, pero está inconcluso porque debe tener una longitud de 28 kilómetros.

La carretera entre Trinidad y la ciudad oriental de Santa Cruz también ha sido invadida por las aguas, "algo que no había ocurrido nunca porque se encuentra en una zona alta", dijo Shiriqui.

En todo el departamento de Beni, según datos oficiales, el número de familias damnificadas hasta el fin de semana era cercano a las 11.000, en las provincias de Moxos, Marbán y Cercado.

El portavoz de la Prefectura de Beni, Arturo Mariscal, dijo a Efe que la decisión de declarar zona de desastre a la región se hizo con el propósito de conseguir la mayor cantidad de ayuda posible.

"Nosotros estamos en una situación tan trágica que toda la población de la ciudad está en riesgo ante el crecimiento de las aguas. No solo se trata de conseguir ayuda, sino que debe dejarse de ver con ojos políticos esta situación", dijo Mariscal.

El funcionario aludía al hecho de que Beni es uno de los feudos de la oposición al presidente Morales, cuyo Gobierno ha defendido las acciones que realiza hasta ahora para encarar la crisis en esa región.

La Prefectura y la Alcaldía recibieron hoy ayuda del embajador de Estados Unidos, Philip Goldberg, consistente en material para construir 1.500 carpas, 1.536 equipos de higiene, 1.000 bidones de agua, cien equipos para determinar la contaminación hídrica, así como purificadores de agua.

Según Goldberg, su presencia en el Beni es un testimonio del "aprecio y la solidaridad del Gobierno de Estados Unidos con los bolivianos", frente a los severos desastres naturales.