Gallardón pide un millón de euros para ser socio de lujo de Madrid 2016

MADRID.-  El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, se ha resignado al triunfo de doña Cuaresma "la del gesto agrio y estricta conducta" y puede que tenga que resignarse también al éxito del espíritu de Ebenezer Scrooge, el tacaño prestamista de Dickens, entre los grandes empresarios . Desembolsar un millón de euros por cabeza para Madrid 2016, el proyecto de la candidatura de la capital a los Juegos Olímpicos dentro de ocho años, a los millonarios les parece desmesurado.

Imágenes para el sueño Madrid Olímpico.

Cuando a la vuelta del verano, un todavía eufórico Gallardón predicó ante las patronales de las empresas que apoyar a la candidatura olímpica de la capital era la mejor inversión de futuro, se le olvidó explicarles las tarifas de esa inversión.

Cuatro categorías

El gran y pequeño mundo empresarial se ha quedado con la boca abierta al ver los precios para ser patrocinadores de la candidatura a los JJ.OO. del 2016 por parte de la capital. Y eso aunque se les oferta una tarifa variada, de acuerdo con las posibilidades de cada uno. Así, los socios de lujo, los que más poderes económicos tengan --léase grandes empresas y grandes bancos-- tienen la oportunidad de por un modesto millón de euros, formar parte del Club Madrid 2016.

Para los patrocinadores menos espléndidos, pero que quieran lucir posibles, existe una segunda modalidad, la de patrocinador preferente. Este club sólo exige apoquinar 500.000 euros. En la tercera categoría, la de patrocinador Madrid 2016 se puede ingresar rescatando de la caja de la empresa 250.000 euros, que tampoco está mal. Y por último, los más tacaños, los que quieran evitar el fantasma del amigo de Scrooge, pueden salir del paso entregando al gran proyecto de apoyo a la capital 30.000 euros. No es tanto por calmar una conciencia usurera.

El no de los primeros

De momento, algunas de las primeras compañías de este país han dicho que "no" formarán parte del proyecto, al menos por el momento. Prefieren esperar, y aseguran entre risas que no es por miedo a las represalias de Esperanza Aguirre por apoyar un proyecto tan querido por Gallardón. Los esfuerzos de Mercedes Coghen, la consejera delegada de Madrid 2016, que en cuanto puede arenga a los empresarios y apela a su conciencia económica para con la capital de España, porque los beneficios del Madrid 2016 se mantendrán durante 20 años", no tienen el eco deseado.

"No es el mejor momento, ni económico ni político, para desembolsar tanto dinero, --explica un analista consultado--. A la incertidumbre económica hay que añadir la incertidumbre sobre el futuro político de Alberto Ruiz-Gallardón y Madrid 2016 puede que sea su proyecto más personal. Es comprensible que algunas empresas prefieran esperar y ver", explica el analista de una gran empresa que ha optado por esperar.