"El Portalón" de Vitoria abrirá el edificio a las visitas guiadas

Vitoria.-  El histórico restaurante vitoriano "El Portalón", situado en un edificio del siglo XV, abrirá en los próximos meses sus puertas a las visitas turísticas guiadas, según adelantó a EFE su nuevo gerente, Alberto Ortz de Zárate.

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(EFE)

El histórico restaurante vitoriano "El Portalón", situado en un edificio del siglo XV, abrirá en los próximos meses sus puertas a las visitas turísticas guiadas.

El local reabrió anoche sus puertas con una cena ofrecida al escritor británico Ken Follet, quien acudió a Vitoria para presentar su obra "Un mundo sin fin".

Hoy abrirá al público en general, tras unos meses cerrado por el cambio en la gerencia del restaurante, cuyo edificio es propiedad de la Caja Vital. La familia Sanchotena, que durante los últimos 27 años ha dirigido el local, ha pasado el testigo a la familia Ortiz de Zárate, propietaria del vitoriano restaurante Arkupe.

El edificio es uno de los restaurantes más antiguos de España, ya que ha funcionado como fonda desde el siglo XV, cuando se creó para atender a los comerciantes que traían la lana castellana al mercado de la plaza de las Burullerías.

Apenas ha habido cambios en el local, que ha retirado las esculturas de Sanchotena y el piano, pero conserva toda su decoración renacentista.

Con la llegada de la nueva gerencia se van a abrir a los visitantes algunas partes del edificio que permanecían sin uso público, como la bodega y la buhardilla.

En el sótano se va a crear una bodega con vinos de la Rioja alavesa y se va a habilitar una sala de catas. Así, cuando el edificio se abra a los visitantes, se les incluirá un recorrido por sus cuatro plantas y una cata de vinos.

También se va a habilitar la buhardilla como sala de exposiciones gastronómicas, como un atractivo más para los visitantes.

Así, los que quieran conocer El Portalón no tendrán que quedarse a comer o cenar. El objetivo es atraer al edificio a parte de los turistas que visitan la cercana catedral vieja.

Respecto a la gastronomía, seguirá la senda clásica con toques modernos del Arkupe. Ayer, en la cena ofrecida a Ken Follett se sirvió un menú alavés, consistente en una lasaña de morcilla sobre crema de alubias, crema de patatas a la alavesa, lomos de merluza con almejas y de postre una espuma de leche merengada con crujiente de canela.