Una médico española y una enfermera argentina siguen secuestradas en Somalia

Madrid.-  Una médico española y una enfermera argentina, ambas cooperantes de Médicos Sin Fronteras (MSF), continúan secuestradas en Bossaso (Somalia), hasta donde hoy se desplazará el embajador español en Kenia para seguir de cerca las negociaciones.

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(EFE)

Javier Sancho, portavoz de Médicos Sin Fronteras, atiende a los medios en la sede de la ONG para informar de la evolución del secuestro de dos cooperantes una española y una argentina en Somalia.

Las dos rehenes son la médica leonesa Mercedes García y la enfermera argentina Pilar Bouza, que según el ministro de Información de la región de Puntlandia, a la que pertenece Bossaso, Abdulrahman Mohamed Bankah, "se encuentran con vida".

Ambas fueron secuestradas a las 8.30 hora local (5.30 GMT) del miércoles, por una banda de seis delincuentes, dos de los cuales ya se han entregado, cuando se dirigían en un todoterreno al centro nutricional en el que trabajan.

A última hora de la tarde, fuentes de Exteriores dijeron a Efe que la vía de la negociación con los raptores se mantenía abierta, aunque había entrado en un "compás de espera", ya que había anochecido en la zona.

En el mismo sentido se ha pronunciado el subjefe policial de Bossaso en declaraciones a Efe que ha confirmado que las autoridades somalís han decidido suspender hasta hoy las negociaciones por la falta de luz.

Tras esto, el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha decidido que el embajador de España en Kenia, Nicolás Martín Cinto, viaje a Bossaso "lo antes posible".

España no tiene representación diplomática en Somalia debido a que es un país en el que no hay Gobierno central por la situación de caos y de lucha entre clanes que impera desde 1991.

Según el ministro de Información de la región de Puntlandia, las autoridades somalís negocian la liberación con los secuestradores, quienes, según el subjefe policial de Bossaso, Abdulahid Said Game, pueden formar parte de un grupo de milicianos no identificado.

Las conversaciones con los raptores, que exigen no ser procesados judicialmente y que respeten sus vidas tienen lugar en la población de Giriso, a cinco kilómetros de Bossaso.

La doctora española Mercedes García, natural de Cuadros (León), es una mujer de unos 50 años que, según el alcalde de esta localidad, lleva varios años trabajando como cooperante, aunque en Somalia llevaba menos de un mes.

La otra cooperante secuestrada, la enfermera argentina Pilar Bouza, llevaba seis meses en el país africano, trabajando en un proyecto de nutrición y asistencia de los desplazados por el conflicto interno de ese país.

La madre de la enfermera ha dicho a Efe que su hija "estaba muy contenta con su trabajo" y que la familia está muy preocupada, "porque no se sabe nada en absoluto de cómo está Pilar".

El portavoz en España de Médicos Sin Fronteras, Javier Sancho, ha explicado que ambas profesionales tienen mucha experiencia y que en el momento del secuestro iban identificadas como médicos de la organización, "lo que no significa que gocen de inmunidad".

Por su parte, la presidenta de la ONG en España, Paula Farias, ha hecho un llamamiento a los secuestradores así como a las autoridades que median en el rapto, para que se encuentre una solución "negociada" y se evite el "enfrentamiento armado".

Asimismo, ha señalado que si bien el resto del equipo de médicos que trabajaba en la zona ha sido evacuado, continúan tres miembros de la ONG que están "en contacto" con las autoridades somalís.

Debido al caos y a las luchas de clanes que imperan en la zona desde hace más de quince años, Somalia está catalogado por el Ministerio de Asuntos Exteriores como un país en el que el nivel de inseguridad y el riesgo de atentado son "muy elevados".