Varios congresistas conocieron en 2002 de la "asfixia simulada", según The Washington Post

Washington.-  Varios congresistas, entre ellos la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, fueron informados en el 2002 de la dura técnica de interrogatorio conocida como "asfixia simulada", aseguró hoy el diario The Washington Post.

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(EFE)

Esta semana, el general Michael V. Hayden, director de la CIA, se vio obligado a admitir que se habían destruido cintas en las que se observaba como se aplican estas técnicas de interrogatorio a dos supuestos terroristas.

Esta revelación se produce en medio de la polémica por la destrucción en 2005 de unas cintas de la Agencia Central de Información (CIA) en la que se observaba como se aplican estas técnicas a dos supuestos terroristas.

Esta semana, el general Michael V. Hayden, director de la CIA, se vio obligado a admitir que se habían destruido las cintas después de que los medios de comunicación informaran a esa agencia que la historia iba a hacerse pública.

Hayden afirmó que se destruyeron las cintas porque, de haber llegado a dominio público, se habría expuesto a los agentes de la CIA a "represalias por parte de Al Qaeda y sus simpatizantes".

Este sábado, el Departamento de Justicia de Estados Unidos y el organismo de control interno de la CIA decidieron abrir una investigación preliminar al respecto.

La Casa Blanca aseguró el viernes que el presidente estadounidense, George W. Bush, no recuerda haber sido puesto al tanto de las grabaciones hasta el jueves pasado, cuando se lo comunicó el director de la CIA.

Esta agencia empezó a grabar los interrogatorios como una "prueba interna", después de que el presidente de EE.UU. autorizara métodos más severos para conseguir información de supuestos terroristas.

The Washington Post informó hoy de la visita que hizo en septiembre de 2002 una delegación de los dos partidos por el centro de detenciones de la CIA, donde fueron informados de las nuevas técnicas de interrogatorios puestas en marcha para hacer hablar a los sospechosos.

Entre ellas las del "ahogamiento o asfixia simulada", que años más tarde sería condenada por el Congreso estadounidense, con el apoyo de los dos partidos.