Eurobasket ´09 (Cuartos). España 86 - Francia 66: mis adorables vecinos

¡A semifinales! España luchará por las medallas una vez más tras apabullar a Francia en los cuartos de final por 86-66, con un inconmensurable Pau Gasol (28 puntos) al mando de una nave española que rozó la perfección defensiva contra el equipo más físico del Eurobasket.

Pau Gasol y Tony Parker. Dos estrellas de la NBA frente a frente: uno estará en semifinales del Eurobasket de Polonia, el otro no

Francia no olvidará este partido en mucho tiempo. Después de clasificarse para este Eurobasket en la "repesca" (con el rodaje competitivo que ello conlleva), Francia ha llegado hasta el fatídico cruce de cuartos de final con el casillero de derrotas vacío, merced a una férrea defensa que ha permitido apenas 64,2 puntos de media a sus rivales. Además, para más inri, Francia ha contado con un día más de descanso que España para preparar este choque a vida o muerte, que una vez más ha hecho buena la excepción que empareja al primer equipo clasificado (e imbatido) de un grupo, contra el cuarto (a priori favorito) del otro. El resultado, el que están pensando.

No contentos con eso, podemos mostrar optimismo a raudales. Si echamos la vista atrás remontándonos a las dos últimas citas continentales, sirviéndonos de hemeroteca, comprobamos como el verdugo de Francia en los cruces, ha sido a la postre campeón del Eurobasket. Y si no que se lo pregunten a Grecia o a Rusia, equipos que han saboreado la gloria continental haciendo valer la "superstición gala".¿Será España digna heredera al trono europeo? De momento ya hemos dado un paso más. Y de gigante.

Una excelente defensa y un acertadísimo ataque se dieron de la mano para acabar con las opciones de nuestros adorables vecinos. Tony Parker veía como la atención española se centraba en él: Scariolo decidió neutralizar a su estrella para evitar que funcionase el resto del equipo, y resultó. De la mano de Ricky Rubio, el base francés empezaba a dar síntomas de no estar cómodo sobre la pista del Spodek de Katowice, sede de la fase final del Eurobasket. Así, España empezaba a hacer gala de un espectacular acierto exterior que lideraba Rudy Fernández con tres triples en el primer periodo, para un total de 5 de 9 para la selección. Los franceses, sin su estrella al timón, se marchaban al banquillo con un 25-15 tras los diez primeros minutos. Olé Scariolo.

¡Y todavía no había aparecido Gasol! Francia intentaba aprovechar su poderío físico en ambas zonas, mostrando una dureza que ya plantearan otros equipos ante España. Pero el de Sant Boi,con la ayuda de Felipe Reyes, empezó a apoderarse del rebote ofensivo, atrapando hasta siete rechaces que supo convertir en 17 puntos. La máxima diferencia llega con el 35-19, pero el juego no es fluido aún. Sólo los errores franceses y la escasa rotación de su banquillo hacen la ventaja española más amplia. Además, Pau Gasol (14 puntos y 4 rebotes en los primeros veinte minutos) empezaba a dar muestras de que su dominio, y con él el de España, está más allá del músculo del que presumen los franceses, y dejaba el marcador al descanso en un esperanzador 47-32.

A Francia no le salían las cuentas. España se acercaba peligrosamente rápido a la cifra de puntos encajados, y ellos no anotaban sino la rácana proyección de la media de la que presume este Eurobasket. Claro que eso no iba a ser lo único novedoso de lo que se disfrutaría en Polonia: la ilusión de Garbajosa y la magia (por fín) de Ricky ponían la ventaja española cerca de los veinte de diferencia (55-36). El único que lo intentaba por el equipo francés era Ronny Turiaf, que se mostraba aguerrido y luchador bajo los tableros, pero la defensa de los hermanos Gasol y lo incisivo del mayor en ataque, dan con el francés en el banquillo al cometer su cuarta falta. Hoy ningún español pisaba el freno en defensa, toda diferencia era poca. Así, y con otros 10 puntos de Pau Gasol en este tercer periodo, España despegaba de nuevo con un 73-52 en el marcador.

El último cuarto sólo alargó la agonía francesa, y puso el broche (¿de oro?) a la fiesta española. El cruce de cuartos de final parecía superarse por sexta vez consecutiva en un Eurobasket, aunque Francia no iba a bajar los brazos tan fácilmente (77-66). Un empujón más de la mano de los titulares, y España salía ovacionada del parquet polaco merced a una nueva demostración de superioridad (86-66). Porque si hasta ayer éramos los propios españoles quienes nos temíamos a nosotros mismos, ahora vuelve a ser el resto del panorama baloncestístico quien se echa a temblar cuando se alarga la sombra de los de Scariolo.

Pau Gasol volvió a ser el baluarte del equipo nacional al firmar la mejor actuación individual de este Eurobasket, gracias a sus 28 puntos (con 11 de 13 en tiros de campo), 9 rebotes, 3 tapones y 1 asistencia, para un total de 35 de valoración. ¿Qué fue antes, la mejoría de Pau, o la de la selección? Sea como fuere, el triunfo ha sido coral una vez más. El trabajo defensivo que acabó con la paciencia y el acierto de Tony Parker (6 puntos, la peor anotación del máximo encestador de este Eurobasket), y la superioridad en ataque uno por uno de todos los jugadores españoles, han echado por tierra las ilusiones de Francia, que tardará mucho tiempo en olvidar este partido.

En semifinales, esperamos al vencedor del partido entre Grecia y Turquía. Uno u otro equipo, será sin duda la siguiente víctima de un equipo lanzado. Un equipo, el español, dispuesto a cerrar todas esas bocas que deseaban enterrar a una generación llena de talento y ávida de triunfos. Un equipo, el de Scariolo, deseoso de escribir otra página dorada en los anales, alzando el primer Eurobasket de la historia del baloncesto español. Un equipo, el nuestro, campeón.