Ricky Rubio: crónica de un fichaje anunciado

Después de todo un verano repleto de incesantes negociaciones, en tan solo unas horas Ricky Rubio ha pasado el reconocimiento médico y ha sido presentado como nuevo jugador del Regal FC Barcelona. El club catalán ha llegado a un acuerdo de alrededor de 3,5 millones de euros con el DKV Joventut para que el joven jugador español vista de azulgrana la próxima temporada.

Ricky Rubio, satisfecho al lado de un exultante Joan Laporta

 Se acabó el culebrón del verano. Tras unas kilométricas negociaciones (en el tiempo y en el espacio), Ricky Rubio ya es oficialmente jugador del Regal FC Barcelona. El vigente campeón de la ACB contará en sus filas con el numero cinco del pasado "draft" de la NBA, sumando así a su proyecto deportivo un talento innato como el del joven jugador catalán.

Se queda en Barcelona con la intención de ganarlo todo y dice estar muy contento por fichar "por uno de los mejores clubes de Europa, de competir en una de las máximas competiciones y de crecer como jugador." El ya jugador azulgrana confesó que "mi prioridad era ir a la NBA, pero ante la imposibilidad por parte de Minnesota Timberwolves de poder pagar mi claúsula, yo quería quedarme en casa." 

La mejor oferta económica la puso encima de la mesa el Real Madrid, mientras que el proyecto deportivo más interesante era el de Minnesota Timberwolves en la NBA. Pero el jugador de 19 años ha decidido no salir de la ciudad condal compaginando así su propio bienestar con la mejor propuesta deportiva al alcance de su mano, y firmando un contrato (por seis años) cuya claúsula más importante es la que le permite irse a la NBA a partir de su segunda temporada en el club. Se trata sin duda de "una de las operaciones más importantes de la historia de la ACB", palabras de un Joan Laporta ansioso por recoger cuanto antes los frutos de un esfuerzo económico tan grande como el que ha hecho por el de El Masnou.

El acuerdo entre Regal FC Barcelona y DKV Joventut se ha cifrado finalmente en 3,7 millones de euros, una suculenta cantidad de dinero con la que, como bien dice Ricky Rubio, podrán desde Badalona construir un buen equipo. "Los aficionados de la Penya no lo verán con buenos ojos porque es un rival directo, pero les da algo bueno, porque les ayudará a crecer". Ricky Rubio tiene ahora por delante encajar con la filosofía del club, así como del proyecto, y hacer de ese baloncesto moderno y bonito para el espectador que tantos clubes desean, una realidad en Barcelona. Aun con dos importantes jugadores en su puesto como lo son en el Regal FC Barcelona Víctor Sada y Jaka Lakovic (dos jugadores de corte totalmente distinto al del internacional español), Ricky Rubio deberá complementarse con ambos dentro del equipo, para hacer del equipo catalán un equipo realmente competitivo en todas las competiciones.

Aunque de lo que no hay duda, es que este fichaje no afecta únicamente en estos momentos al actual campeón de la ACB, ni siquiera al propio jugador. Y es que con su futuro decidido, el jugador actualmente a las órdenes de Sergio Scariolo en la selección española, ganará en soltura y confianza de cara al Eurobasket de Polonia que se celebra a partir de la semana que viene. "Todo esto me ayudará para poder ir a la selección con la mente más despejada y poder conseguir el objetivo que tenemos en mente". De esta forma, el combinado nacional no se encontrará con el único "refuerzo" de Pau Gasol, sino que ganará enteros en relación a las demás selecciones al poder contar con un Ricky Rubio tranquilo y mágico una vez más. Todo ello, en pos de ese cetro continental que tanto se nos resiste, y es que el propio Ricky dice que "sería un sueño venir aquí con una medalla de oro colgada al cuello". 

Y quién mejor que Pau Gasol para celebrar y aprobar una decisión como la que ha tomado su compañero en la selección. "A Ricky le vendrá bien quedarse dos años más en España", para "crecer como jugador y marcharse a la NBA con más fascultades". El ala-pivot catalán, que ya pasara por esta "dramática" situación antes de dar el salto a la mejor liga de baloncesto del mundo, ha dicho que "él tiene 18 años, yo me marché allí con 20 y aún así, muchos lo consideraron precipitado".  

"Debíamos hacerlo; el jugador, por su calidad, lo merece", sentenció Joan Laporta, poniendo punto y seguido a la rueda de prensa en la que se resolvía el último capítulo del culebrón del verano: punto porque ya (por fín) tiene un final, y seguido porque la aventura de Ricky Rubio en el Regal FC Barcelona, quién sabe si plagada de tantos éxitos como ansía conseguir, no ha hecho más que comenzar.