Somos lo que quieran llamarnos, pero amamos a nuestros hijos/as y queremos la custodia compartida.

Hace unos días me puse en contacto con una asociación feminista que está en contra de la custodia compartida, concretamente se llama Plataforma Luna. Un colectivo que critica con dureza la existencia del SAP asegurando que es un invento de los siempre violentos hombres que luchan por la custodia compartida para justificarse. Con muy buenas palabras les expliqué mi situación, con la única esperanza de que comprendiesen que es un error sus afirmaciones y que estas son dirigidas desde el odio y el rencor. La respuesta a mi escrito fue un e-mail donde la solución que me dieron a mi problema es que me olvidase de mi hija, porque luchar por estar junto a ella es maltratarla

Evidentemente en su e-mail me ponían muchas otras cosas, todas ellas degradantes para el ser humano y para ellas mismas. Pero quiero aclarar una cosa y es que estas señoras no son feministas, simplemente son un grupo de hembristas que no pueden razonar porque su odio les ciega, capaces de pisar a sus propios hijos por intereses económicos o comodidad personal.

Hablando con mi madre, una verdadera feminista que ha resistido 40 años de represión por el simple hecho de ser mujer y comunista, no comprende nada de esto, no se explica como es posible que en nombre de la lucha que con tanto orgullo ellas llevaron a cabo, un grupo de mujeres intenten someter a sus hermanos, padres e hijos, no puede comprender como es posible que ellas lucharan para terminar con el patriarcado, para dejar de ser esclavas de su condición sexual y las que actualmente hablan en nombre del feminismo intenten someter al hombre, por el simple hecho de ser hombre. Se sorprende particularmente cuando le explico que los padres que luchamos por la custodia compartida somos tachados reiteradamente por estas hembristas de machistas y violentos, porque quizás el sueño de ella y de tantas que murieron por la igualdad fuese precisamente eso, haber podido criar a sus hijos en igualdad, donde se implicasen sus parejas en la crianza y educación de sus hijos. Como ella dice, “yo fui esclava del patriarcado y ahora que soy abuela soy esclava del rencor y la degeneración hembrista”.

Es lamentable, como por intereses oscuros un grupo de señoras y algún que otro señor pueden jugar de esta forma con la verdad y la lógica. Es increíble que alguien se atreva a decirle a un padre que abandone la lucha por poder abrazar a su hija.

Pero aun mucho más increíble, es que haya gente que utilice un argumento obsoleto de veracidad y intente hacer creer a la gente que la custodia compartida es una trama machista de los violentos, pues todos sabemos que lo único que se esconde tras esa lucha, es amor, mucho amor por nuestros hijos e hijas y la continuación de la lucha que nuestros padres y madres iniciaron por la igualdad.

Juan Manuel Salas Ramírez

http://jmsalasramirez.blogspot.com/