Copa Confederaciones: Así es Estados Unidos, rival de España

La supuesta progresión del equipo americano está aún por concretarse en torneos de gran escala. Estados Unidos se ha convertido en el dominador de la CONCACAF pero se estrella cuando acude a eventos de primer nivel y en esta Copa Confederaciones está teniendo una nueva oportunidad de mostrarse ante los ojos críticos de quien ven a un ‘gigante’ con pies de barro.

Bradley, la joven estrella norteamericana

El primer problema llegó con la participación, casi al mismo tiempo, en la Copa de Oro (torneo que le dio acceso a esta Confederaciones tras vencer en 2007), lo que impidió que el equipo formara con serenidad en ambos torneos y se debilitara sobremanera. Toca decidir: ¿Lavar la imagen de cara a Sudáfrica 2010 o mantener el estatus de líder dictatorial de la CONCACAF?

Cómo llegaron aquí: Campeones Copa de Oro 2007

Estados Unidos le ganó su lugar en la Copa Confederaciones 2009 tras ser el campeón en la Gold Cup del año 2007. Los estadounidenses vencieron en la finalísima a su gran enemigo dentro de la CONCACAF, México, por 2-1 y consumaron su dominio en la zona. Guardado adelantó a los aztecas pero los goles de Landon Donovan y Benny Feilhaber remontaron la cita y decantaron el torneo y la clasificación para la Copa Confederaciones a favor de los yankees.

Entrenador: Bob Bradley

Pese a sólo haber sido jugador semi-profesional en la Universidad de Princeton durante cuatro años, el caché nacional de Bradley se cuajó poco a poco en su trabajo como técnico en la MLS. El de Monclair, New Jersey, lleva más de 25 años de carrera en los banquillos estadounidenses, trabajando en universidades, escuelas futbolísticas y centros donde su aportación al fútbol base ha sido clave. En 1996 empezó su trayectoria como asistente en equipos de primer nivel y fue dos años más tarde donde encontró su acomodo como técnico oficial en los Chicago Fire, con los que ganó esa misma campaña el título de campeón nacional. Tras pasar por Metrostars y Chivas USA, en 2006 accedió al cargo de la federación como seleccionador sub 23 y tras el cese de Bruce Arena tras Alemania 2006, tomó el cargo como seleccionador absoluto. 23 victorias, 3 empates y 8 derrotas es su registro actual aunque el haber ganado la Copa de Oro de 2007 y el tener más de medio pie en el próximo Mundial, hablan de una gran regularidad.

El Equipo:

Un fútbol actualmente secundario como el de la MLS y algunos jugadores que buscan consistencia y continuidad en Europa, son la mezcla ideal que forma el núcleo de la selección estadounidense. Un estilo poco concreto, basado en las individualidades de varios de sus mejores jugadores que, ante la falta de equilibrio, llevan la batuta de un equipo que suele juntar muchos sus líneas y que acumula efectivos en mediocampo a la hora de defender.

En la portería es clave y fijo el meta del Everton Tim Howard, sobradamente conocido en la Premier y un portero de garantías con pocas salidas de tono. La corpulencia defensiva es uno de sus fuertes y prueba de ello es el ‘gigante’ Onyewu y el capitán Carlos Bocanegra, que suelen ser habituales en el Standard de Lieja y Rennes respectivamente.

En medio campo son vitales las apariciones en banda y como llegadores de DaMarcus Beasley (Rangers) y Clint Dempsey (Fulham), así como la creatividad y participación de un todocampista renovado para el juego colectivo como el mediático Landon Donovan. El mediapunta es la pieza angular sobre la que se sustenta el ataque americano que tiene en punta al gigantón Jozy Altidore como principal hombre gol. También tendrán su hueco en el once jugadores como Sacha Kljestan, posiblemente el aún joven Freddy Adu y el defensor Premier Spector.

La Estrella: Michael Bradley

La gran esperanza del futuro yankee crece a pasos agigantados en la Bundesliga. Michael Bradley es una de las piezas claves en el mítico Borussia Monchengladbach, al que intenta salvar del descenso con su creatividad, desborde y capacidad de llegada. Un diamante en bruto de sólo 21 años que ya triunfó en el Heerenveen holandés (donde anotó 16 goles) y que suma con Estados Unidos nada menos que 28 internacionalidades que le encaminan a convertirse en uno de los mitos del fútbol estadounidense. Con dotes de mando, ambición y una gran pierna diestra, su capacidad para actuar en varias posiciones le hace ser un auténtico lujo para una selección que capitaneará muchos años.

Historia de la Copa Confederaciones:

El equipo yankee tiene dos participaciones hasta la fecha en este torneo. En la primera edición, celebrada en 1992 en Arabia Saudí y con apenas cuatro participantes, fue ridiculizado por los anfitriones, que le ganaron en su duelo de semifinales (3-0). Aunque después lograron la tercera plaza ante Costa de Marfil al golearles por un contundente 5-2, nadie olvidó el mal trago. En 2003, en Francia, las cosas no fueron mucho mejor ya que concluyeron la fase inicial de grupos en la última posición tras caer sucesivamente contra Turquía y Brasil y logrando un solo punto ante Camerún.

Por lo visto hasta ahora, Estados Unidos se ha mostrado débil en defensa, tremendamente imprevisible en ataque y con ambición. Es este punto, el que habla de su hambre y el riesgo que asume para buscar buenos resultados, la mejor noticia para España pues con espacios y sin un rival encerrado, la 'Roja' no debería sufrir lo más mínimo.

El Enganche