Los amigos de la CIA

El grupo de amigos de la CIA seguirá juntándose a tomar un par de tragos para seguir rememorando las anécdotas por las que se conocieron en Abu Ghraib y Guantánamo dentro del departamento especializado en torturas. Hablarán de la Guerra del Terror como un recuerdo lejano pero del que fueron uno de los actores principales.

La ley y el respeto por los derechos humanos para ellos no contarán porque, como dijo el nuevo jefe del departamento, León Panetta, sólo cumplieron órdenes que estaban amparadas en las normativas norteamericanas impuestas por George Bush. A no ser que no se hayan excedido en la ejecución de las directivas, su director no los llevará a prisión. Así que sus días libres de cargos continuarán por un buen tiempo

Sin embargo, un informe de La Cruz Roja, que será revelado por Mark Danner en New York Review of Books, asegura que lo que ellos hicieron contra los detenidos en Guantánamo fue “torturarlos” y tratarlos en forma “inhumana” y “degradante

“Ahogo por agua; estar de pie durante tiempo prolongado; golpes y patadas; confinamiento en una caja; desnudez prolongada; privación del sueño y uso de música fuerte; exposición a temperaturas frías/agua fría; uso prolongado de esposas y grilletes; amenazas; afeitadas forzadas y privación o restricción de alimentos sólidos”, son las practicas que aplicaron, según describe Danner una parte del escrito de la CIRC, contra los presos en la cárcel estadounidense.

No importa, lo que ellos realizaron está amparado, como dice Vicente Romero en el diario  Pagína 12, en lo que en Argentina se llamó la ley de Obediencia Debida. Medida que salvó de la Justicia por muchos años a los oficiales que torturaron durante la última dictadura en el país bajo la justificación de que sólo cumplían con las ordenes de sus superiores.

Si interesa saber que harán después de juntarse a beber en el bar de turno. ¿Serán oficinistas dentro del servicio o agentes encubiertos?. Si, tanto ellos como todos, saben que durante 8 años fueron preparados para torturar y que ahora, de la noche a la mañana, el juego acabó, según les indicó el nuevo presidente Barack Obama, es difícil creer que estarán de brazos cruzados.

Es ingenuo pensar que los chicos de la CIA no harán nada para recrear el añejo Mundo que les permitió hacer y deshacer a sus gustos todas las oscuras decisiones de un mandatario fascinado por las justificaciones rimbombantes de guerras sin sentido